Tienes una fabulosa idea para una nueva app, pero ¿tienes demasiado miedo de pedirle un préstamo a tu tía millonaria? Bienvenida al mundo de la ansiedad inducida por los nuevos negocios. La barrera más grande para comenzar es, por lo general, la falta de dinero. Saber adónde nos dirigimos, a quién pedirle y, sobre todo, cómo pedirlo, puede ser el único obstáculo entre tú y ese estilo de vida que tanto has soñado. Pero hay buenas noticias: con un poco de planeación cuidadosa, en breve competirás con millonarias conocidas a nivel mundial.
- FAMILIA & AMIGOS
- Tengo miedo de dar el primer paso. Con el riesgo de parecer Deborah Meaden, de Dragons’ Den, necesitas superarlo. Según Dominic Perks, CEO de Hambro Perks, quien invierte en compañías de alto crecimiento, los amigos y la familia son “la ruta más usada para encontrar los fondos iniciales”. Incluso Amazon despegó gracias a las conexiones personales, así que no sientas pena y, si no tienes parientes adinerados, piensa en solicitar pequeños préstamos a una variedad más amplia de personas. - ¿Pero exactamente cómo? Regla No. 1: Trátalos como lo harías con cualquier inversionista externo: con una gran propuesta y presentación. “Dales una oportunidad de tomar una decisión en tu proyecto para que no lo vean sólo como un favor”, aconseja Perks. Esto significa contratar a un abogado calificado (organizaciones como StartEd ofrecen ayuda gratuita para impulsar a los nuevos negocios) y conseguir un acuerdo de accionistas (para proteger los derechos de cada una de las partes). También debes presentarles un plan de negocios bien estructurado, el cual señale cuándo podrán volver a ver su dinero. Vale la pena ser realista y no pedir todo el dinero que necesitas en una sola exhibición. Considera que necesitas llegar a cierto punto. Una vez que demuestres que sí puedes devolver el dinero inicial estarás en una mejor posición para solicitar más.
- ¿Y luego? Es probable que tus inversionistas quieran involucrarse con más que sólo dinero. Para evitar un flujo constante de consejos no solicitados, agenda una junta cada cierto periodo. Durante estas reuniones explícales que pueden proponer ideas y lo verán como una manera de estar al tanto en tu progreso.
- CROWDFUNDING
- ¿En verdad? ¿Sí es una opción seria? Es una situación ganar-ganar: no sólo consigues la inversión que necesitas, sino que también es una gran herramienta de marketing. Funcionó a la perfección para BorrowMyDoggy, la nueva app bancaria Monzo y el negocio de comida callejera London Union. Los tres han recaudado más de un millón de libras con un financiamiento colectivo. - Obtén el dinero Necesitas incrementar la emoción, así como desglosar con detalle a dónde se irá el dinero y cómo beneficiará el negocio para que los donadores sepan por qué has puesto esa cantidad como meta final. Los beneficios, como ser los primeros en usar el producto o tener su nombre en el empaque, pueden ayudarte. Es también buena opción pedirle a tus amigos y familia que donen el primer día para que los demás no se desalienten por falta de interés. ¿Estás atorada? Los consultores de crowdfunding, como TribeFirst y CrowdFundMe2, te ayudarán con tu página por una porción del dinero recaudado.
- Suena bien, pero ¿a dónde debo ir? “Diferentes plata- formas tienen diferentes fortalezas”, indica Emma Watkinson, CEO de la boutique online SilkFred, la cual recaudó más de 145,000 libras a través del nanciamiento colectivo. ¿Qué significa esto? Bueno, si deseas financiar un producto, como arte, donde puedas pagar a las personas a través de la compra del consumidor, Kickstarter o Crowdfunder son las mejores opciones. Quienes desean reunir capital para escalar un nuevo negocio pueden necesitar ofrecer acciones a los interesados, las cuales requieren plataformas como Crowdcube.
- Y, por último, una regla de oro... Debes atrapar la aten- ción de los inversionistas y conservarla. Algo difícil de hacer por internet, donde millones de otras distracciones están a un clic de distancia. Esto significa que debes poseer una gran historia que sea acerca de ti, tu empresa o de quién tendrá un impacto tu compañía. Diles esto a través de un video: puede duplicar las tasas de éxito para las campañas de recompensas. “Los nombres reconocidos y con experiencia también son importantes”, añade Watkinson. ¿Estás creando un negocio de moda después de haber trabajado cinco años en Burberry? Menciona eso. Los desconocidos necesitan ver que vale la pena invertir en ti.
- PRÉSTAMO BANCARIO
Suena demasiado sencillo... y en un sentido sí lo es, pero necesitas un buen historial crediticio (puedes veri car esto en una página certi cada vía in- ternet) y no es inusual que te pidan de- jar una garantía personal. Traducción: pueden obligarte a vender tu casa para cubrir el préstamo si tu negocio se va panza arriba. - ¡Qué horror! Suena espantoso. Es cierto que es un riesgo, en especial cuando estás en la etapa inicial preparando todo. “La deuda no es algo bueno para las primeras fases, sin importar el actual clima financiero y la aparente falta de propensidad de los préstamos”, explica Perks. - ¿Entonces los préstamos bancarios no son una opción?
Para los aventureros de la tecnología, sí. ¿Productos físicos? No necesariamente. Como Murray lo describe, los bancos son útiles “si logras demostrar que puedes recuperar el dinero en un año”. Por ejemplo, si tu empresa es de zapatos y necesitas medio millón de pesos para comenzar, mientras puedas demostrarle al banco que alcanzas a vender lo suficiente para pagar el interés, el dinero es tuyo. - ¿Hay mejores alternativas? Muchas. El esquema gubernamental de préstamos para pequeñas empresas ofrece financiamientos “pequeños” con una tasa de interés baja, de uno a cinco años, que conllevan asesorías gratuitas durante 12 meses. También hay subvenciones específicas, como los del programa de energía de Shell.
- CAPITAL EMPRENDEDOR & CAPITAL DE RIESGO
- ¿Quiénes son? El capital emprendedor son compañías que invierten en nuevos negocios. Los de riesgo hacen lo mismo, pero son personas físicas. Además del dinero, ambos brindan experiencia, asesoría y contactos que pueden valer oro para las emprendedoras. - Ok, ¿y cuál debería elegir? “Con una nueva idea, los capitales de riesgo son una mejor opción”, recomienda Perks. “Tienen más apetito por riesgos primarios y están más atraídos por nuevas ideas, mientras que los de capital emprendedor prefieren invertir una vez que la idea está en marcha para sólo darle seguimiento”. - ¿Cómo hacerlo? “Crea una urgencia”, afirma Kate Jackson, fundadora de la plataforma de negocios TableCrowd y antigua abogada. “Si necesitas darle seguimiento, siempre incluye una revisión acerca de la última inversión o una sociedad que hayas asegurado. Incluso puedes decir: ‘Ya llevamos tanto y esperamos alcanzarlo para tal fecha’”. Pero es vital que seas honesta. Estas personas, quienes han tenido empresas antes, pueden detectar mentirosas a kilómetros. Mantén una vibra positiva, pero tampoco digas que tu negocio tendrá ventas de millones de dólares en un año.
- ¿Dónde puedo conocer a uno? Haz lo que hizo Daniel Murray: cofundó Grabble (el Tinder de la moda) y encontró sus inversiones al convertirse en un miembro de Google Campus. La suscripción es gratuita y organizan eventos semanales; Spaceport, en Londres, ofrece algo similar: planea días de presentaciones y eventos para expandir tus conexiones. Busca individuos que hayan invertido en compañías similares a la tuya. Redes como UK Business Angels Association y Allbright pueden ayudarte con esto. - ¿Cómo me preparo? ¡Haz tu tarea! Estas personas esperan muchos detalles, inclusive las ganancias proyectadas y la investigación del mercado. Murray recomienda una presentación personalizada en vez de un plan estándar de negocios. Es una explicación con base en imágenes creada en PowerPoint donde desarrollas quién eres. “Cuando te enfocas en la historia y la visión con más imágenes en lugar de palabras, tienes espacio para maniobrar”, recomienda.
TE RECOMENDAMOS:
3 Sencillas maneras para ahorrar dinero sin cambiar tu rutina
10 Trucos que las mujeres inteligentes hacen con su dinero
Kakebo: Los 10 tips que harán que tengas más dinero
TRADUCCIÓN: ITZCÓATL YEDRA HERNÁNDEZ / Foto: iStock Photo