¿Haces todo lo posible por ahorrar pero siempre te quedas en ceros? Presta atención a los siguientes hábitos...
¿Cómo fomentar la buena gestión financiera, y sobre todo, cómo llevarla a cabo? Tener un buen control de tu dinero requiere de planificación y visión a largo plazo, pero algunas personas no son capaces de tener crecimiento económico o de eliminar las deudas de sus tarjetas de crédito. Sin embargo, las mujeres exitosas a nivel económico tienen algunos hábitos en común:
Hábitos de las mujeres que siempre tienen dinero
Planifican un presupuesto mensual
¿Cuánto ganas al mes y a qué destinas dicho dinero? Establece prioridades, objetivos, ingresos, gastos, ahorros e inversiones mensualmente con el objetivo de tener un mejor control de tus gastos y que tu quincena no desaparezca en un abrir y cerrar de ojos. Define cuánto puedes gastar por día en “extras” y ponte un límite cuando quieras recurrir al “tarjetazo”.
Ahorro constante
Sin importar cuánto ganen al mes, las mujeres que siempre tienen dinero guardan una parte de sus ingresos re forma regular, esto con la misión de mantener un colchón financiero para imprevistos,
Transferencias inteligentes
Recurre a un ahorro automático, es decir, realiza quincenal o mensualmente transferencias hacia cuentas de inversión o ahorro para que no tengas la tentación de gastar de más lo que tengas en la tarjeta que utilizas regularmente.
Mentalidad inversora
Una mujer con buenas finanzas invierte y no acumula, entiende lo que significa el valor del dinero y recurre a bienes raíces, fondos de inversión o acciones para hacer crecer su economía. Si consideras que no tienes una correcta educación financiera, capacítate para saber cómo gestionar tu dinero de forma inteligente.
Evitan deudas innecesarias
Priorizan calidad sobre cantidad y no tengas gastos superfluos. Utilizan sus tarjetas de crédito con responsabilidad y son conscientes de lo que es realmente necesario antes de realizar un gasto.
Fuentes de ingresos
Una mujer con estabilidad financiera tiene fierentes fuentes de ingresos y no se limitan a un solo trabajo. Generan dinero a través de emprendimientos secundarios en los que demuestran sus talentos y habilidades.