Con los siguientes consejos, aprenderás a tener una sana relación con tus ingresos y evitar a toda costa quedarte en bancarrota
1. Cuidado con los descuentos.
Y también con las compras online. Sí, es cierto que a veces puedes encontrar gangas, pero en este tipo de circunstancias también es fácil comprar por comprar; por ejemplo, cosas que en realidad no necesitas, objetos para tenerlos ?por si acaso?, ropa que usarás cuando bajes los kilos que te faltan, etc. Todos estos factores los analizaron en el Instituto de Economía y Finanzas de Roma, donde también se descubrió que al hacerlo online, algunas páginas guardan tus preferencias y así, cuando vuelvas a entrar, te muestran automáticamente artículos tentadores.Un Consejo:
No compres online cuando estés aburrida. ¿Quieres ir de shopping, porque hay rebajas? Primero ve a tu clóset y checa qué es lo que tienes y qué te hace falta. Haz una lista con lo que realmente quieres o necesites, y al estar en una tienda léela y cúmplela. Llevar las cosas por escrito te hará entrar en razón.2. Comprar para subir el ánimo.
Es un cliché en el que todas hemos caído y es que cuando tenemos el ánimo bajo o nos sentimos agobiadas, es típico salir de compras. No hay nada de malo en ello, pero si tienes problemas para pagar otras cosas, ¡cuidado! Si el dinero no es un problema en tu vida, la situación no se hace más sencilla, pues de acuerdo con un estudio que se llevó a cabo en Alemania, aunque puedas gastar en exceso, si lo haces sólo para llenar un vacío, el acto de la compra perderá el efecto al poco tiempo. Esto se traduce en un nuevo malestar y, por supuesto, ganas de gastar de nuevo.Un Consejo:
La psicóloga Patricia Fernández recomienda: ?Antes de lanzarte al centro comercial, intenta identificar la emoción: ansiedad por algún tema del trabajo, aburrimiento por no tener nada que hacer, etc. Escribir la situación suele ser de gran ayuda?. Según la experta, llevar a cabo este ejercicio te preparará mentalmente para afrontar la situación y calmarte, sin tener que gastar todo tu salario en una tienda.3. ¿Gastar te provoca culpa?
Date cuenta de cómo te sientes cada vez que utilizas tu dinero y qué sensación tienes al final del día. ?Por ejemplo, si te compras un vestido que te encanta y te sientes feliz, ¡bien! Si en la noche te sigues sintiendo igual, vas por buen camino. Si dos días más tarde continúas contenta, ¡genial?, dice Elena Sánchez Miranda, coach personal. Sin embargo, la especialista recalca que si te invade el sentimiento de culpa y remordimiento, entonces es momento de preguntarte por qué te pones a ti misma en situaciones que te hacen sentir mal. Sólo analizando lo que sientes, podrás lograr cambios.Un Consejo:
¿Deprimida? Cómprate unas flores bonitas o rodea tu casa con plantas. El punto es que seas consciente de que la abundancia llegará a ti a través de tus emociones, pues los seres humanos somos como imanes de atracción. Si crees que no te mereces lo que quieres o el dinero que anhelas no llegará, esas son las situaciones que eventualmente recibirás. ¿La solución? Ve la riqueza que hay en tu vida: tus amigos, tu familia, tu novio, tu mascota, etc. Si das las gracias de lo bueno que tienes, te llegará más de lo mismo