Una triatleta más dura que el cáncer de mama

ROSY_RIOJAS.jpg

Rosy Riojas es una triatleta y entrenadora de personas que quieran realizar una de estas carreras tan demandantes y fuertes, ella tiene una larga carrera en su haber, de hecho muestra con orgullo sus medallas, esas que la llevaron a la meta y a los podios de muchas de ellas. Pero además de ser una mujer de hierro también es una mama de tiempo completo, y su hija es la razón más grande que tiene para vivir, el verla crecer y estar con ella fue uno de los pilares que la sostuvo cuando le dieron el diagnóstico de cáncer de mama. Para aquellas que no han tenido que recibir esa terrible noticia, es como si la vida te sentara de golpe y te lanzara al suelo a toda velocidad, no sabes que reaccionar, aunque en muchas ocaciones tu cuerpo te lo dice antes que el doctor que tienes frente a ti. Así como a Rosy le pasó, le ha pasado a cientos y miles de mujeres, que con tacto o sin él reciben la terrible noticia de que el cáncer está en la mama y que tienes que actuar rápido o te unirás a las cifras que la SS despliega cada año ante los medios. Relacionado: “Reconstruyendo la vida después del cáncer de mama” Después de un auto examen de rutina Rosy sintió una protuberancia “Primero noté que tenía una bola en mi axila y mi ginecóloga me pidió hacer un ultrasonido de mama y axila. Después, por lo preocupante de este resultado, tuve que hacer una biopsia, fue ahí donde se confirmó que habían dos tumores pequeños cancerígenos en la mama y había hecho metástasis en ganglios”. Esta es una condición común, donde el cáncer se extiende y se tiene que atacar de inmediato, cabe mencionar que el oncólogo es el único que pude decirte cuál será el tratamiento y estás en todo el derecho de pedir una segunda opinión. “Uno de los primeros sentimientos que tienes durante la confirmación de la enfermedad es el miedo, un miedo que te paraliza y te da incertidumbre sobre lo que vendrá, tanto en tratamiento com en el hecho de que puedes morir y lo primero que me vino a la mente fue dejaré sola a mi hija” explica Riojas, como atleta y madre de familia, tenía que sacar fuerzas de todos lados, no sólo para el tratamiento sino para el día a día “Mi familia estaba muy preocupada, sobre todo por el tratamiento, lo que podría pasar y el saber que muchas veces este diagnóstico es fatal, pero traté de darles tranquilidad diciendo que estaba preparada para lo que Dios tuviera en mi camino”. Afortunadamente Rosy, fue de las 3 mujeres de cada 10 que sí tienen un tratamiento a tiempo, debido al pronto diagnóstico posterior a su descubrimiento “Debido a que el cáncer se había extendido a los ganglios, pero por suerte a ningún otro órgano, y las células eran triple negativo, los médicos decidieron empezar con un tratamiento de 16 quimioterapias, mastectomía bilateral radical, y 28 radioterapias” adicional al tratamiento invasivo tuvo una reconstrucción de senos durante la mastectomía se inició con la primera etapa poniendo expansores y 11 meses más tarde se retiraron para poner una prótesis. Relacionado: "¿Cómo es tener cáncer a los 28 años?” Cada mujer que se enfrenta al cáncer de mama es una guerrera, pero al ser una deportista de alto rendimiento Rosy logró sacar fuerzas de otros lados “¡Me sentí fuerte e invencible! El ser triatleta ha formado en mi una gran disciplina, pero sobre todo, una gran fortaleza mental. En donde me he propuesto constantemente a superar mis propios límites, exigirme físicamente y creer que soy capaz de lograr cualquier objetivo. Entonces esta sería una competencia más, ahora yo contra el cáncer, no me dejaría vencer, incluso, no dejaría de entrenar ni competir y ¡así fue!” explica, muchos pacientes con cáncer tratan de hacer de su vida algo normal, aún después de sentirse terriblemente tras el tratamiento, esto les da una sensación de normalidad que los mantiene centrados y no pensando en si ganará el cáncer o ellos. Relacionado: “Todo lo que tienes que saber sobre crecimientos en los senos” Su entrenamiento, como dice en sus propias palabras continuó, pero el apoyo que recibió después del diagnostico fue extremadamente bueno, ella recomienda que: “se apoyen con psicólogo, amistades y en su familia. Esta etapa es de sentirse fuertes y de tener fe en que pueden lograr vencer al cáncer, busquen más de dos opiniones para su tratamiento y sepan que habemos más mujeres pasando por lo mismo y siempre dispuestas a apoyarnos, aquí no hay cada quien por su lado”. Además de agradecer que está viva y que está con su hija y su familia, Rosy regresó al ejercicio y creo una fundación llama agujetas rosas, que ayuda a las mujeres del norte del país a entender que esto sólo es un bache y no una caída completamente, sobre su recuperación nos dice “ha sido muy rápido, sobretodo del tratamiento y de las cirugías, de lo que nunca nos recuperamos del todo es de los efectos secundarios de éstos sin embargo he aprendido a adaptarme a ellos y a no dejarme caer”, sobre su regreso a las carreras nos dice que: “después de las radiaciones sentí que mi cuerpo era más débil, mis pulmones y corazón ya no trabajan igual, aunque eso no ha impedido que siga entrenando y compitiendo, tengo la esperanza de poder recuperarme y competir al nivel que lo hacia antes, eso mismo me mantiene activa”. Relacionado: “No me digas superficial por perder mi cabello”

También te puede gustar:
Existen dos pilares energéticos que debemos cuidar durante esta temporada…
El contacto cero implica cortar todo tipo de comunicación directa o indirecta…
Desde 1993 se celebra el día del soltero y la soltera cada 11 de noviembre