El agua fría podría hacerte devorar después de nadar. Un estudio de la Universidad de Florida halló que los nadadores que entrenaban en agua a 20 ºC consumían un promedio de 877 calorías posteriormente. Aquellas que nadaban en alberca a 33 ºC ingerían un promedio de 608. Los investigadores sospechan que una temperatura corporal fría te hace comer más.