Porque tus ejercicios no están completos sin una rutina de flexibilidad.
Antes de entrenar necesitas calentar; después de entrenar necesitas estirar. Realiza en casa la rutina de flexibilidad que te dará la agilidad de un gato. Pero además de esto, los estiramientos te ayudan a relajarte después de un arduo entrenamiento. Además, los estiramientos te ayudan a prevenir las lesiones por el ejercicio, e incluso a mejorar tu postura en algunas disciplinas como el jogging o running.
Por qué debes ser más flexible
De acuerdo con una investigación empírica del Instituto Furman de Carreras y Entrenamiento Científico (FIRST) en Carolina del Sur, los corredores que quieren ser más rápidos acelerar, a los que simplemente quieren disfrutar del deporte deben practicar estiramientos antes y después de correr.
Tener una rutina de flexibilidad permite seguir corriendo en la vejez.
Esto se debe en gran medida, a que los estiramientos mejoran la resistencia cardiorrespiratoria, la fuerza muscular, la resistencia, y la flexibilidad. Haciendo que tus músculos resistan el embate del tiempo. Esta es la rutina:
1. Flexor de cadera
Contrae los glúteos y carga el peso del cuerpo ligeramente hacia delante mientras giras el torso hacia la izquierda con la mano sobre las caderas
2. Estiramientos de tendón de corva
Hincada, extiende completamente la pierna izquierda al frente y dobla la derecha atrás. Lleva el pecho hacia el frente tratando de que toque tu rodilla izquierda, sin encorvar la espalda. Mantén la posición cinco respiraciones y cambia de lado. Coloca una correa alrededor de tu pie derecho. Tira suavemente de la pierna hacia el techo hasta que sienta un ligero estiramiento. Mantén durante 30 segundos, luego cambia de lado.
3. Estiramiento piriforme
Acostada boca abajo, estira la pierna izquierda detrás de ti y dobla la rodilla derecha hacia el frente a la altura del abdomen. Inclínate hacia delante y coloca las palmas de tus manos frente a ti en el piso. Sostén la posición por cinco respiraciones y cambia de lado.
4. Estiramiento para hombros
De pie, entrelaza los dedos por detrás de la espalda (a) y jala hacia atrás y arriba los brazos hasta notar tensión creciente en hombros, pecho y brazos (b). Sostén la posición durante cinco respiraciones, descansa 20 segundos y repite el ejercicio una vez más.
5. Estiramiento de isquiotibiales
Hincada, extiende completamente la pierna izquierda al frente y dobla la derecha atrás. Lleva el pecho hacia el frente tratando de que toque tu rodilla izquierda, sin encorvar la espalda. Mantén la posición cinco respiraciones y cambia de lado. Sigue entrenando y siendo flexible con esta rutina de estiramientos en casa para potenciar tus resultados. Con información de Runner’s World México.