Un estudio publicado en el diario Chest descubrió que 36% de las personas con sobrepeso a quienes se diagnosticaba con asma y tomaban medicamentos para controlarlo no padecían realmente la enfermedad. ¿Entonces? El exceso de peso puede disminuir el volumen de los pulmones, provocando resoplidos y falta de aire, síntomas similares a los del asma, explica el investigador Stephen Scott, doctor en medicina. Si te cuesta trabajo respirar, visita a un neumólogo. Él decidirá si debe hacer una prueba de funcionamiento pulmonar, la cual ofrece un diagnóstico más certero, en lugar de depender simplemente de los síntomas.