Esta mermelada fortalecerá tus defensas gracias a sus ingredientes llenos de vitamina.
SECRETOS DE ESTA DELICIA: reunir en un frasco unos de los más potentes ingredientes para un sistema inmunológico a prueba de resfriados, gripes y otros ataques microbianos. Esta receta es un auténtico coctel de antioxidantes: una investigación en India y publicada en el Journal Food Research International encontró que las guayabas poseen la mayor densidad de antioxidantes entre 14 frutas (esto es 495 mg de antioxidantes por cada 100g).
Otro estudio publicado en el Journal o Medical Food comprobó que el consumo diario de miel mejora los niveles de diferentes antioxidantes en la sangre y reduce indicadores de inflamación; además, tiene propiedades antibacterianas y ha demostrado ser efectiva contra la gastroenteritis. El jengibre, por su parte, no solo es digestivo, sino que, al incrementar el calor corporal, lleva hacia la superficie de la piel una sustancia llamada dermidicina, la cual combate las infecciones.
Preparación
Pon a cocer un kilo de guayaba en trozos con tres tazas de agua. Cuando estén blandas (luego de unos 15 minutos) pásalas por un colador, reservando la mitad del agua en la que las cociste, y retira las semillas. Coloca esta pulpa y el agua que guardaste con una taza de miel, el jugo de un limón y su ralladura (elige los amarillos que son más aromáticos) y una chda. sopera de jengibre en polvo (también puedes usar la raíz fresca rallada). Cocina a fuego lento sin dejar de revolver alrededor de una hora, hasta que tome una consistencia mielosa.
TIP: puedes agregar nueces o especias (como canela o vainilla) para variar el sabor a tu gusto.
Dale un toque delicioso a tu desayuno, agrega un poco de mermelada de guayaba, miel y jengibre, a una rebanada de pan de granos enteros o a esta deliciosa avena cruda con girasol.
