Seguro te pasa que escuchas trastorno por déficit de atención y lo primero que piensas es en un niño que conociste hace tiempo y que estaba medicado para poder tratar su condición. Un estudio revela que el trastorno por déficit de atención no está relacionado sólo con la infancia y que puede perdurar en las mujeres y hombres adultos. Cada 13 de julio se conmemora el Día Mundial del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) y por esta razón los especialistas hablan al respecto y dejan en claro que esta condición impacta en diferentes áreas de la vida, no sólo de los niños, sino de los adultos también, en México existen aproximadamente 22 millones de niños, de los cuales 5 al 7% tienen TDAH y alrededor del 4 al 5% continuarán con síntomas hasta la vida adulta, de acuerdo con el manual diagnóstico y tratamiento del TDAH, es decir que si conoces a alguien que tuvo trastorno por déficit de atención de niño, es probable que aún continúe con él. “Los indicios de esta condición cambian de acuerdo a la etapa de la vida y el género del paciente, los hombres en la infancia tienden a ser más inquietos y las mujeres más distraídas, al paso del tiempo los síntomas se modifican. El retraso en el diagnóstico facilita que se sumen otras condiciones psiquiátricas, como depresión, ansiedad y trastornos de conducta entre otros”, destaca la Doctora Patricia González Therapeutical Lead Area Neuroscience and General Medicine de Takeda México. Relacionado: “5 problemas que pueden transmitirse a través de los genes”
¿QUÉ ES EL TRASTORNO POR DÉFICIT DE ATENCIÓN?
“Favorecer el inicio del tratamiento oportuno permite al paciente mejorar su rendimiento escolar, evitar dificultades para relacionarse, no caer en adicciones y llevar una vida plena durante su crecimiento”, agrega la especialista en el tema. El origen del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad está asociado hasta en 80% a causas genéticas y es una condición altamente heredable. Sin embargo, existen otras causas asociadas como complicaciones durante el embarazo y nacimiento (prematurez o bajo peso), así como exposición materna al tabaco; todos estos son factores que influyen en el neurodesarrollo. Como si lo anterior fuera poco, una persona con trastorno de déficit de atención puede tener síntomas en la vida adulta que podrían confundirse con otros padecimientos como: trastornos de sueño, baja autoestima, irritabilidad, problemas laborales, accidentes automovilísticos, rechazo social, mal manejo financiero e incluso divorcio por inestabilidad en la pareja. Dado que son conductas “comunes” es probable que no se detecte en adultos y por lo tanto no se trata como tal. Relacionado: “El estrés postraumático de Ariana Grande”
¿CÓMO SE DIAGNOSTICA EL TRASTORNO POR DÉFICIT DE ATENCIÓN?
El diagnóstico está basado principalmente en los síntomas que presenta el paciente, para ello se realizan entrevistas y se aplican escalas, con la intención de recabar información que corresponda a los criterios basados en el Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM 5). El TDAH tiene tres características de cómo se presenta:
- Inatenta (distracción e incapacidad para mantenerse enfocado)
- Impulsividad/Hiperactividad (incapacidad para detenerse y movimiento en exceso).
- Combinado (mezcla de los dos anteriores)
Actualmente se sabe que el tratamiento del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad debe ser multidisciplinario, en el que participan médicos especialistas, psicólogos y terapeutas. Esto incluye tratamiento farmacológico, el cual es fundamental; la psicoeducación es otra parte importante en el abordaje de la condición que consiste en dar a conocer al paciente y la familia las características del diagnóstico y tratamiento. Dentro de los objetivos de este abordaje se encuentran favorecer la adaptación escolar, mejorar la socialización, disminuir los síntomas de distracción, implementar medidas de organización que mejoren el funcionamiento del paciente y su entorno. Relacionado: "¿Qué es la epidemia de la soledad?”
Síguenos en Instagram
Ver esta publicación en Instagram