No te quedes con ganas de postre, esta deliciosa tarta no necesita hornearse. No lo pienses más y sigue estos sencillos pasos para disfrutarla sin culpas.
Rendimiento 12 porciones
Tiempo de preparación 1 hora 10 minutos
Porción recomendada 1 rebanada
INGREDIENTES
Para la base
- 2 tazas de uvas pasas
- 1 taza de dátiles grandes (medjool), sin semillas
- ¾ de taza de almendras
- ½ vaina de vainilla (las semillas)
- 1 cucharadita de aceite de coco, fundido
Para el relleno
- 5 manzanas amarillas, sin piel, sin corazón y en cubos
- ½ taza de dátiles grandes (medjool), sin semillas
- Una pizca de canela molida
- 2 cucharadas de azúcar de coco
- 2 cucharadas de semillas de chía
Para la costra
- ¼ de taza de nueces en mitades
- ¼ de taza de azúcar de coco
- 1 cucharadita de aceite de coco
PREPARACIÓN
Para la base
Coloca las pasas, los dátiles, las almendras y la vainilla en tu procesador de alimentos. Procesa a pulsos hasta que la sea más fácil procesar a máxima velocidad. Deberás obtener una consistencia compacta y manejable.
Forra el fondo de un refractario para tarta con papel encerado y engrasa las orillas con aceite de coco.
Agrega la mezcla de dátiles al molde y esparce bien para cubrirlo por completo y obtener una base bien aplanada. De ser necesario humedece tus manos con agua para que la mezcla de dátil se despegue con facilidad. Lleva la base a tu congelador y reserva por al menos 30 minutos.
Para el relleno
Coloca 3 tazas de manzanas en cubos dentro de tu procesador limpio y agrega los dátiles y la canela. Procesa a pulsos para que se comience a incorporar y enseguida procesa durante 3 a 4 minutos o hasta obtener una consistencia parecida a la del puré de manzana; debes raspar los bordes del procesador según se necesite para integrar perfectamente.
Vacía esta preparación en un tazón e incorpora el resto de las manzanas, azúcar de coco y semillas de chía; revuelve bien.
Para la costra
Coloca todos los ingredientes en tu procesador y procesa a pulsos hasta obtener moronas.
Para el armado
Retira la base de la tarta del congelador y rellena con la preparación de manzanas; alisa la superficie lo más posible con ayuda de una espátula o el canto de una cuchara. Espolvorea la costra de nueces sobre la tarta y refrigera por al menos 1 hora antes de servir. Comparte y disfruta.