Aunque sepas que el bronceado causa cáncer y arrugas, dejarlo puede ser difícil. Ya sea en una cama especial en invierno o en la playa en el verano, los eles seguidores de esta costumbre no sólo están obsesionados con la apariencia de una piel morena, sino que además tienen una ráfaga de emociones que los motiva a hacerlo una y otra vez. “Los rayos UV detonan la producción de endorfinas similares a los opioides”, afirma el Dr. Byron Adino , profesor de investigaciones de abuso de drogas y alcohol del Centro Médico Texas Southwestern. Esos neuroquímicos pueden mejorar tu estado de ánimo, reduciendo el estrés y dolor. “Tienen el mismo efecto que la morfina y la heroína”. En un estudio, 74% de las personas que se broncean unas cuantas veces a la semana presentaron una relación adictiva y algunos experimentaron miedo y náuseas si no se sometían a una sesión. Así que si sufres de esta adicción, aquí hay 12 sencillos pasos para de una vez dejarlo.
- Paso 1: Repite: “No es demasiado tarde”
“Hay una mentalidad de ‘lo hecho, hecho está’, pero cada día que te protejas hace la diferencia”, dice la dermatóloga Doris May. Un estudio australiano reveló que las personas que comenzaron a utilizar protector solar a diario tenían una piel más joven después de casi cinco años.
- Paso 2: Usa el espejo como motivación
Si la idea de cáncer de piel o piel arrugada no te asusta, considera el “tatuaje del acné”. No exponer tus granitos al sol puede hacerlos menos evidentes de manera temporal, a largo plazo “broncearse puede ocasionar que las glándulas crezcan y oscurezcan las cicatrices existentes”, explica la Dra. Day. “Una simple y pequeña cicatriz a los 20 puede verse horrible a los 40”.
- Paso 3: Paso a paso
Si lo dejas de un día a otro, puedes recaer. Mejor disminuye tu exposición al sol poco a poco, aconseja Jenifer Cullen, PhD, psicóloga clínica del Hospital McLean. Entonces si te bronceas tres días a la semana, trata de hacerlo dos veces durante un mes, luego sólo una vez. Cuando estés bajo el sol, cambia a un FPS 30 y no salgas durante horas pico (10 am a 4 pm). Broncéate cada vez menos hasta que seas capaz de dejarlo por completo. Alternar entre bronceados naturales y artificiales, es otra forma de decirle adiós, sin perder el brillo de una piel dorada.
- Paso 4: Consiéntete por un buen comportamiento
Compra productos que te permitan disfrutar del sol sin preocupaciones. Las editoras de Cosmo aman Mott 50: las prendas son minimalistas con un Factor de Protección Ultravioleta (FPU) de 50, una gran mejoría para una playera normal que sólo contiene FPU 5. No olvides el protector solar para tu rostro, manos y pies.
- Paso 5: Consigue el brillo desde tu interior
La luminosidad puede conseguirse de manera natural: comer frutas y vegetales repletas de agua, vitaminas y antioxidantes (como bayas, jitomates, sandías y lechugas) mantienen la piel radiante, sostiene la experta. También se encuentran las cremas con vitamina C y péptidos. Prueba la del Dr. Dennis, Gross Skincare Hydra-Pure Vitamin C.
- Paso 6: Imítalo
Los bronceados caseros han mejorado con exageración, con esa la maquillista Joyce Bonelli. Elige uno con aceite de argán para combatir la resequedad del invierno. Para un rápido cambio de color usa St. Tropez Tanning Essentials Express Bronzing Mousse (sephora.com), el cual se enjuaga fácilmente, o añade un poco de Cocoa Brown’s Instant Tan Bronzing Gel (rickysnyc.com) a tu base.
- Paso 7: Sé feliz
“Las conductas adictivas son, con frecuencia, motivadas por el estado de ánimo”, informa la psicóloga Sherry Pagoto, PhD, profesora de medicina preventiva y comportamiento en la Universidad de Medicina de Massachusetts. Si utilizas los rayos UV para lidiar con el estrés, cámbialos por un recurso más saludable: ve al gimnasio, mira una comedia o ten sexo (a solas también cuenta).
- Paso 8: Invierte en una caja de luz
El sol activa la serotonina (el químico de la felicidad) en tu cerebro. Una caja de luz hace lo mismo sin los rayos UV. Consigue una que brinde 10,000 lux, como la lámpara Verilux Happy Light Liberty Natural Spectrum Energy. Enciéndela durante 30 minutos por la mañana mientras comes tu desayuno.
- Paso 9: Consume D
“Muchas mujeres mienten al decir que quieren obtener vitamina D, pero es muy falso. La exposición incidental del sol les da a la mayoría de las mujeres la dosis necesaria”, explica la Dra. Day. “Si en verdad estás de ciente, toma un suplemento o consume alimentos ricos en vitamina D, como el salmón, la tuna, las yemas de huevo o la leche fortiFIcada”.
- Paso 10: Ejercítate
¿Te asoleas para ocultar las imperfecciones como la celulitis? El ejercicio es una solución. “La manera más efectiva es practicar un entrenamiento de intervalos intensos”, recomienda la fisióloga Michele Olson, PhD. Haz cardio por 20 segundos, seguidos de 20 más de descanso, durante 20 rondas. Definir los músclos con entrenamiento de fuerza desaparece la celulitis. Sostén pesas de cinco kilos, haz tres sets de 20 zancadas y 20 sentadillas.
- Paso 11: Maquíllate
El contour puede crear los mismos pómulos de nidos y una quijada estructurada. Prueba el consejo infalible de Bonelli: “Con un tono mate más oscuro que tu base dibuja un tres en cada lado de tu cara, define las esquinas exteriores de tu frente, debajo de tus pómulos y tu quijada”.
- Paso 12: Luce tu piel blanca
Un bronceado, en definitiva no es la única manera de verte hot y saludable. El tinte en las cejas y las pestañas semipermanentes crean un buen contraste. El labial rojo con subtonos azules, favorecen a las pieles más claras. La base líquida dejará tu piel con un acabado más sedoso que el polvo.
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