Por: Mariana Mijares
Waitress ha sido un parteaguas en la carrera de Sara Bareilles, no solo profesionalmente sino también a nivel personal, pues haciendo esta obra conoció a su ahora esposo: Joe Tippetty, obtuvo nominaciones al Grammy y al Tony, y luego dio el salto a la televisión con la serie Girls5eva. Al mismo tiempo, este musical marca un hito en la trayectoria de Aitza Terán, actriz mexicana nacida en Sonora, quien, tras destacar en proyectos como Los Últimos Cinco Años, asume su primer rol protagónico en un musical de gran formato.
Con su reciente estreno en el Teatro San Rafael, este mes de la mujer, te contamos más sobre la obra que se ha convertido en un símbolo de empoderamiento femenino, con un equipo creativo original conformado mayoritariamente por mujeres y con una protagonista: Jenna, representando el viaje de muchas personas que buscan reencontrarse con su propia voz.
Aitza, ¿Cuál ha sido el mayor reto al dar vida a un personaje tan complejo como Jenna, tanto a nivel vocal como emocional?
Aitza: Jenna sin duda es un personaje complejo. El mayor reto para mí ha sido ir descubriendo su sentido del humor, su personalidad y su relación con los demás personajes sin enfrascarla en que es una mujer que vive violencia en casa. Vocalmente me parece maravillosa, disfruto mucho sus canciones, pero también me ha costado mucho trabajo encontrar el lugar equilibrado en mi voz para cantar notas de cabeza o mixtas muy suaves. Sin duda el mayor reto es hacer la obra completa con solo dos momentos fuera de escena.
Ambas han dado vida a Jenna, pero ¿cómo ha influido esta experiencia en su percepción del viaje emocional del personaje?
Aitza: Antes yo conocía únicamente el soundtrack, era como conocía la historia, también algunos videítos por ahí en YouTube. Pero ya al conocer la historia completa todo cobra mucho sentido. El viaje de Jenna, las cosas que va viviendo, la compañía que está teniendo, del abuso en el que vive pero que no acepta, o cómo de pronto lo procesa. Es una mujer que no quiere mostrar que está en esa posición, las cosas se van desenvolviendo y se va dando cuenta de la situación en la que vive y lo que hace después.
Me parece también un viaje maravilloso que representa la historia de muchas mujeres. No solo en México, sino alrededor del mundo, pero México desafortunadamente es de los países con mayores incidentes de feminicidios y pues la mayoría empieza con la violencia doméstica. Esta es una historia muy hermosa de empoderamiento, de amor propio, de ver la luz al final del túnel; pero sobre todo, de voltear a un lado y ver que no estás sola, que puedes contar con tu familia, con amigas, con gente que se vuelven familia para tomar valor y fuerza y salir de esa situación.
Sara: Fue interesante para mí porque durante mucho observé a Jesse Mueller (quien originó el personaje) y era increíble. Yo era nueva como actriz, no tenía una formación formal, así que al asumir el papel, fue interesante cuestionarme: ‘¿Estoy tratando de emularla? ¿Estoy tratando de copiar las cosas que ella hizo?’ y luego poder sentirme más relajada y encontrar mis propios ritmos.
Encontré mucha ternura en este papel, y en la conexión con las amigas, las meseras. Realmente sientes esa amistad, y lo mucho que hace una diferencia. Y también otra de las relaciones que me llamó fue con Joe, el dueño del restaurante, y quien se vuelve una especie de mentor. Todos necesitamos a alguien, un poco fuera de nuestra vida, que simplemente nos diga: ‘Creo en ti’. Y eso realmente me conmovió.
“She Used to Be Mine” se ha convertido en un himno. ¿Por qué creen que esta canción resuena tan profundamente en el público sin importar su contexto?
Aitza: Creo que es tan especial porque nos identificamos mucho con esas palabras y con esa historia. Todos hemos estado en esa situación que nos recuerda cómo éramos cuando solíamos soñar, porque queremos seguir soñando. Para mí personalmente fue muy duro porque he estado en una situación en la que dejé de soñar; porque otras personas me dijeron que no lo hiciera, o destrozaron mis sueños. Y cuando pensé que no había nada por delante, esa canción me tocó tan profundamente, y hablaba justo de lo que estaba sintiendo. Está escrita de tal manera que realmente toca y conmueve.
Sara: Me encanta lo que dices, y estoy de acuerdo. Porque en última instancia, se trata de decidir que tienes valor. Creo que el significado nos hace viajar a cuando éramos más jóvenes, pero ese espíritu sigue ahí, no se va a ningún lado; sigue contigo. “She Used to be mine” (“Solía ser mía”). Sigue siéndolo. Y vale la pena luchar por esa soñadora.
El tiempo pasa muy rápido, pues Waitress estrenó en agosto de 2015, hace casi 10 años. ¿Qué les gustaría que el público mexicano se llevara de la obra?
Sara: Realmente espero que la gente en México disfrute y se sienta reconfortada con esta obra. Sigo diciendo que se siente como comida reconfortante, y siempre me ha parecido así. Tratamos temas oscuros, pero lo hacemos con alegría y mucho humor. Y creo que, como decía Mary Poppins, ‘una cucharada de azúcar ayuda a que la medicina baje”.
Podemos ahondar en temas oscuros, pero lo hacemos con luz, comunidad y risas. Y creo eso ayuda. Solo quiero que la gente se sienta más cerca de sí misma al final de la obra. Me encanta ver cómo se desarrolla la historia cada vez que la veo; la he visto cientos de veces, pero todavía me encanta. Se me pone la piel de gallina cuando la escucho de nuevo. Me gusta muchísimo.
Aitza: Me gustaría que los mexicanos y mexicanas se sintieran cerca. A pesar de ser una historia radicada en un pueblo de Estados Unidos, podemos relacionar ese lugar con varias locaciones de aquí de México, y también creo que las situaciones son muy cercanas a los seres humanos, a lo que somos. Creo que eso es lo que se van a poder llevar; ese reflejo, sentirnos identificados. Y, si somos lo suficientemente afortunados, que si alguna de las mujeres que esté en el público ha vivido una situación en la que se vea reflejada, pueda salir y tomar acción, y que no se sientan solas y que somos una comunidad de apoyo y que estamos todos en esto.