Haz más ligera la espera de la tercera temporada de la exitosa serie de época Los Bridgerton y prepárate para un fin de semana maratónico con estas tres recomendaciones que no te puedes perder
Netflix apostó por las series de época y no se equivocó, existe un amplio nicho dispuesto a trasladarse al siglo XIX para disfrutar del estilo de vida de la alta sociedad londinense de los años 1800, sin embargo, por diversos motivos se ha retrasado el estreno de la tercera temporada de Los Bridgerton y sabemos que la incertidumbre sobre la siguiente entrega puede ser tortuosa, por eso no puedes perderte estas recomendaciones mientras la plataforma nos sorprende con una temporada más de la serie inspirada en los libros de Julia Quinn.
La ley de Lidia Poët
Protagonizada por Matilda De Angelis, Eduardo Scarpetta y Pier Luigi Pasino, esta serie de época se desarrolla en Italia, cuando Lidia Poët decide ser la primera mujer en estudiar leyes y se enfrenta a un sinfín de desigualdades propias de 1855, año en el que se desarrolla la trama. Cabe destacar que está basada en una historia real, además de contar con una exquisita ambientación gracias a los paisajes y los vestuarios utilizados en el rodaje.
Los herederos de la tierra
Una historia del siglo XIV que se desarrolla en Barcelona y es protagonizada por Yon González, David Solans y Michelle Jenner. El argumento de la serie gira en torno a Hugo Llor, un joven dispuesto a todo por cumplir una promesa familiar.
Es una exitosa adaptación de la novela del mismo nombre escrita por Ildefonso Falcones. A lo largo de ocho episodios, esta miniserie te mantendrá atado al sillón si es que disfrutaste Los Bridgerton.
La emperatriz
En 2022 Netflix lanzó La emperatriz, una serie que consta de seis capítulos protagonizados por Devrim Lingnau, Philip Froissant y Melika Foroutan. Se trata de la historia de una rebelde que se enamora del emperador Francisco e inesperadamente se convierte en su esposa.
Basada en la novela romántica de Gigi Griffis, La emperatriz se ambienta en Baviera del siglo XIX y promete ser todo menos un cuento de hadas.