Seamos honestas, hoy en día cuando escuchas Timothée Chalamet, lo primero que pensamos es que es muuy guapo y un gran actor. Desde sus increíbles interpretaciones en Dune, hasta hacernos volver a creer en el amor por su papel en Mujercitas. Timothée sin duda se está posicionando como uno de los actores más importantes de la actualidad. Aunque al inicio perdió grandes proyectos por una razón irreal: su físico.
Aunque muchas adoran al actor tal y como es, su físico fue uno de sus mayores frenos en el proceso de audición para protagonizar películas. Pasaba a segundo plano sus grandes habilidades como actor por el hecho de que lo consideraban muy delgado para ser protagonista de películas como “Maze Runner” y “Divergente”.
El actor llegó a contar que por más que intentara subir de peso, no lo lograba, lo que llevó a uno de sus managers a desesperarse y dejar de proponerlo para proyectos grandes. Ahí fue cuando decidieron apostar por proyectos más pequeños.
“Estaba tocando a una puerta que no se abría. Así que fui a lo que pensé que era una puerta más humilde, pero en realidad terminó siendo explosiva para mi”
Lo que empezó como una apuesta más segura al ser coprotagonista de la película “Call Me By Your Name”, terminó siendo el inicio de una carrera brillante llena de grandes éxitos. Al punto de que ahora está por estrenar una de las películas más esperadas este año, “A Complete Unknown”,donde dará vida al legendario músico Bob Dylan.