Así fue como Kate Moss pasó de los barrios pobres de Inglaterra a las pasarelas

Kate Moss

Kate Moss es de las pocas personas en el mundo que ha roto con todos los estándares de moda y belleza y logrado reponerse con el paso de los años tras escándalos y problemas con los excesos.

La supermodelo (o antimodelo, como le dicen algunos) ha vuelto a robar cámara tras su aparición en el juicio de Johnny Depp y días después haberse reunido con él en Londres para irse de fiesta, pero ¿conoces su historia? Es muy sonado que fue descubierta a los 14 años en el Aeropuerto John F. Kennedy por la agencia de talento Storm, donde tan solo un año después debutó en la Semana de la Moda de Londres, por poner un ejemplo.

Kate Moss

Foto: Getty

Ese fue solo el inicio. Con el tiempo se convirtió en la musa de diseñadores de la talla de Gucci, Dolce & Gabbana, Versace, Chanel, Missoni y David Yurman, quienes querían tenerla sí o sí en sus pasarelas.

Su vida no siempre fue la de una celebridad ni miel sobre hojuelas.

Nació en Croydon, un barrio obrero y humilde de Londres del que no guarda buen recuerdo “fue duro crecer ahí, no lo echo de menos, lo que sí echo de menos es la inocencia de esa época”, dijo hace algunos años en entrevista.

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Sus padres se divorciaron cuando ella tenía 13 y su familia se rompió, pues su hermano se quedó con su padre y ella se fue con su madre, así que desde temprana edad enfrentó las pérdidas del mundo de los adultos. Afortunadamente su vida profesional tenía otro rumbo. Aún con sus 1.65 metros sin encajar en el canon de belleza de los años 90, se ganó un lugar que no solo ha sido icónico, sino que además su carisma le consiguió grandes amigos. Imagínate tener que competir con Cindy Crawford de 1.75m cuando la industria de la moda era sumamente cuadrada y (sí lo vamos a decir) despiadada, y aun así fue convocada para ser una conejita de portada en Playboy.

Kate Moss

Foto: Getty

Pero no solo eso, tuvo un intenso y mediático romance con Johnny Depp que la misma Moss ha catalogado como algo maravilloso y por el cual sufrió mucho tras terminar. Aunque no la vamos a romanizar demasiado, pues la pareja tuvo sus altercados en público y no les importaba quien estuviera.

Las consecuencias de ser una supermodelo

Las conscuencias de esta vida en las pasarelas con lujos, celebridades y excesos, vinieron más adelante cuando fue juzgada por su extrema delgadez y por aparecer en la portada de una revista consumiendo drogas. Sin embargo, con toda la gracia que la caracteriza retomó el rumbo de su vida y en 2002 se convirtió en mamá de Lila Grace, fruto de su relación con Jefferson Hack. Hoy en día tiene una agencia de talento con grandes figuras pero la carrera más importante, sin duda, es la de su hija, a quien sabrá guiar por el mejor camino siempre para llegar al éxito sin enfrentarse a lo que ella vivió.

“Todo lo que quiero en la vida es no aburrirme jamás”, - Kate Moss.

El fotógrafo Bruce Weber describió el tomarle fotos a Kate como algo fuera de lo normal, dijo que “el sentimiento de excitación que se siente fotografiándola no puede compararse a más que con el que se siente fotografiando animales recién nacidos, o a un chiquillo salvaje”.


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