Según la tendencia de consumo, existe una rivalidad que parece asfixiar al séptimo arte ¿este será el fin de la experiencia cinematográfica tal como la conocemos actualmente?
La tendencia de consumo parece ser muy clara; los servicios de streaming van al alza mientras que el consumo en los cines es cada vez más una experiencia de nicho, y es que al parecer el público acude al cine únicamente cuando un producto en específico genera expectativas que lo orillan a trasladarse a una sala donde se proyecte esa película que tanto esperaba ver.
En su más reciente informe, la Asociación Cinematográfica de Estados Unidos observó que los servicios de streaming han acaparado gran parte del mercado, lo cual podría entenderse perfectamente desde la pandemia que nos obligó a mantenernos en casa durante poco más de un año, este fenómeno golpeó fuertemente a las compañías de producción y distribución cinematográfica tradicionales, por llamarlas de algún modo.
Sin embargo, existen pros y contras en ambos formatos que nos hacen pensar que no todo está perdido y que ambos formatos pueden convivir en un modelo híbrido que garantice la sobrevivencia de ambas experiencias, hoy en Cosmopolitan te contamos cuáles son.
Experiencia vs privacidad
Uno de los principales motivos para elegir el formato en el que vas a consumir entretenimiento está fuertemente relacionada con la experiencia de acudir al cine, percibir el olor a palomitas, disfrutar un snack y vivir la irremplazable vivencia de la tecnología audiovisual que nos ofrece una sala de cine, sin embargo, para las personas más retraídas que prefieren disfrutar la película en la comodidad de su casa existe gran variedad de plataformas, tan diversas como los colores.
Además, si eres una persona #ChildFree, seguramente acudes menos al cine y prefieres las plataformas de streaming desde casa, aunque el llanto de un niño en la sala también forma parte de la experiencia.
Grandes producciones
Aunque se creía que las grandes producciones eran exclusivas para las salas de cines, Roma de Alfonso Cuarón vino a demostrarnos que no es así. Las plataformas también se han empeñado en realizar producciones de calidad.
Suscripciones
La competencia entre las diferentes plataformas ha encarecido la experiencia de consumir entretenimiento desde casa y es que debes pagar diferentes precios a diferentes compañías si quieres ver lo más novedoso de cada productora, la suscripción mensual ronda entre los $100 y los $400 por cada plataforma, aunque a cambio tienes un catálogo muy amplio. Generalmente necesitas registrar una tarjeta bancaria.
Calidad de audio y sonido
Aunque es muy evidente, la calidad de audio y sonido siempre es mejor en una sala de cine, también depende del equipo con el que cuentes en casa para disfrutar aún más la experiencia.
Presencia en las alfombras rojas
De los distintos festivales de cine que se realizan en el mundo algunos han optado por abrirle la puerta a las producciones de las plataformas de streaming, sin embargo, el Festival de cine de Cannes, máxima celebración del séptimo arte, se ha manifestado abiertamente al respecto y continúa excluyendo de la competencia por la Palma de Oro a los contenidos originales de los nuevos formatos.
Celebridades vs streaming
Además del Festival de Cine de Cannes, directores como Christopher Nolan y Steven Spielberg también se han posicionado al respecto. Ambos coinciden en que las compañías de streaming son un peligro para el cine.
¿Y tú qué prefieres? ¿La experiencia completa de ir al cine o la comodidad de utilizar plataformas de streaming?
4D vs contenidos interactivos
Mientras que en el cine puedes experimentar con películas en 4D y algunos otros recursos que harán de tu visita una experiencia sinigual, en las plataformas de streaming también han propuesto contenidos interactivos donde tú decides el rumbo de la historia. La primera película en este formato es Black Mirror: Bandersnatch