Toma nota: el universo constantemente te envía mensajes y señales que te cambiarán la vida si los pones en práctica
Existe la creencia de que el universo oye lo que sientes, incluso de esta idea surge la famosa ley de la atracción, la cual se enfoca en el poder de la manifestación y en el poder de los pensamientos. Si bien el universo no te dice qué hacer ni cómo hacerlo, sí te manda señales que pueden guiarte en tu vida diaria. Sin embargo, estos mensajes no siempre son positivos, sino que también vienen envueltos en esperiencias negativas que eventualmente terminan llevándote por el camino correcto.
¿Has escuchado la frase “Tuve que hacerte sentir incómodo, de lo contrario nunca te hubieras movido”? Es un dicho que relacionan con el universo, el cual también es conocido por ayudarte a salir de tu zona de confort. Pero ¿qué otros mensajes te manda constantemente el cosmos?
8 Poderosos mensajes que el universo quiere que tomes en cuenta
“Un día comprenderás por qué tus tiempos fueron perfectos y por qué las cosas tuvieron que suceder exactamente como lo hicieron. Para sanarte, guiarte y protegerte de ti mismo cuando no estabas en lo correcto. Confía en el proceso”.
“Te doy señales todos los días en tu sueño, en tu línea del tiempo, en tus conversaciones, en tus notas, en las nubes, en las epifanías. Préstales atención y une las piezas. Notarás un patrón. Siempre me estoy comunicando contigo”.
“Hay mucho poder en creer que todo saldrá bien incluso cuando no sabes cómo ni cuándo. Sólo crees que así será".
“Todo lo que persigas se escapará de ti. Atraes las cosas correctas cuando sabes quién eres. Busca plenitud, menos fuerza, más flujo”.
“Cuanto más te diviertas mientras creas tu realidad, más rápido se manifestará para ti. Es simple: cambia la frecuencia y obtén una mejora”.
“No le digas a nadie lo que estás haciendo hasta que esté hecho. La energía exterior puede alterar los objetivos”.
“Te ponen más a prueba cuando llega el momento de elevarte”.
“A menos que aprendas a enfrentar tu propio caos, seguirás inconsciente ante la magnitud de tu propia luz”.