No logramos comprender por qué Blancanieves cantaba de felicidad cada que salía al sol...
1. Espantas a niños pequeños.
No, no soy un fantasma, ni tampoco un vampiro. Sí, si soy amigable y no te voy a comer, lo prometo.
2. Los moretones se ven a kilómetros de distancia.
Y buena suerte encontrando alguna base que pueda taparlos. Lamentablemente en este tipo de piel TODO causa moretón.
3. La gente cuestionará tus decisiones de vida.
Acostúmbrate a la pregunta del millón: ¿nunca te bronceas? No, me hace daño.
4. Ir a la playa es súper caro.
Necesitas muchísimo más que un bikini y una toalla. Si vas a viajar a la playa necesitas un protector solar, un sombrero gigante y algo que tape tu piel de los agresivos rayos del sol.
Definitivamente comprarás aloe después y alguna crema que te quite el ardor de la piel, ¡muchas gracias sol!
5. Te emocionas cada vez que sales al sol y no te quemas.
Y es un sentimiento que sólo tú entiendes.
6. Si tienes pelo negro, no eres Blancanieves, eres dark.
Y más bien te ves más como la niña del aro.
7. El lipstick negro está prohibido.
No, en nosotros no se ve trendy. Parecemos más personajes de The Walking Death o algún vampiro de los 70?s.
8. Cualquiera que se pare a un lado de ti se sentirá súper bronceado.
Y te morirás de envidia.
9. No, tampoco nos podemos vestir de blanco.
Es súper difícil distinguir dónde termina la tela y dónde empieza la piel.