Amor al estilo Ontario

Ottawa no solo es la capital, sino una de las ciudades con más legado de Canadá. Foto: Destination Canada.

Por Marissa Espinosa Puede que Toronto sea la ciudad más diversa de Ontario y la puerta de entrada; sin embargo, salir a carretera es encontrar la esencia de la provincia más habitada de Canadá en aguas cristalinas, aire puro y parques provinciales de ensueño. Disfruta un itinerario de ocho días de Toronto a Ottawa a través de carreteras escénicas junto a tu significant other y enamórate del destino, el viaje y de tu pareja otra vez.

Día 1 y 2: Toronto

La ciudad más grande de Canadá es, sin duda, el mejor lugar para iniciar cualquier exploración gracias a los vuelos directos desde Ciudad de México, la oferta de hospitalidad y la conexión a otras ciudades. Antes de arrancar el auto y manejar carretera disfruten este destino urbano un par de días; entre los diferentes barrios de Toronto, todos caminables y amigables, cualquier vuelta puede llevarlos a lugares espectaculares como Yonge-Dundas Square o Grafitti Alley. Otro punto imperdible está en el histórico Distillery District: se trata el letrero de “LOVE” donde las parejas cuelgan un candado para asegurar su amor. Antes de finalizar el día, pide ‘la prueba de amor’ a tu pareja con la Edge Walk al atardecer en la cima de la CN Tower. Seguros de su relación, pueden brindar tras este rush de adrenalina con una copa de la cava del 360 Restaurante con el skyline de la ciudad que se despliega frente a ustedes.

canada-Distillery-District-add-.jpg

Una parada para cualquier pareja en Toronto es Distillery District, donde pueden sellar su amor colgando un candado. Foto: Destination Canada.

Tras una noche de descanso reparador, desayunen al puro estilo de Toronto con el clásico sándwich de tocino, o peameal bacon sandwich del mercado St. Lawrence y compren un par de bocadillos antes de embarcarse a un escape de la ciudad. Las Islas de Toronto, a un ferry y 10 minutos de distancia, cuenta con distintos parques y caminos peatonales perfectos para un picnic o una caminata romántica con la mejor vista del skyline de Toronto. En la tarde, caminen a la calle King Street West, donde las opciones de fine dining como el italiano Buca abundan para tener una cena de lo más romántica. Si aún queda un poco de energía, a unos pasos, hay muchos bares y clubes nocturnos para disfrutar la noche.

Islas de Toronto

Las Islas de Toronto están a un ferry de distancia y ofrecen vistas inigualables de la ciudad más grande del país. Foto: Destination Canada.

Día 3: Elora

Solo una hora y media los separa del aire escocés de esta localidad y sus manjares del huerto a la mesa, actividades de río y galerías de arte, como la galería del artista de marquetería Stephen Haigh. Después de un lunch y un par de cervezas artesanales en Elora Brewing Company –no te pierdas la pale ale– dirígete al Elora Gorge Park para recorrer el Grand River sobre una batea al atardecer.

Elora, Canadá

Elora es un pueblo muy amigable con el ciclista y es una de las mejores maneras de recorrer sus encantos. Foto: Destination Ontario.

Termina el día en el revitalizado hotel Elora Mill, un sitio ubicado en un molino antiguo hecho por los escoceses y que retiene su encanto histórico, pero se ha renovado para ofrecer una experiencia elegante e íntima para disfrutar en pareja. Los mejores cuartos de este clásico hospedaje son las suites con vista al desfiladero.

Elora Mill

El icónico Elora Mill es un lugar acogedor que ofrece panorámicas del gorge. Foto: Destination Ontario.

Día 4: Muskoka

Diríjanse al norte a Muskoka, región famosa por las hermosas casas de verano junto a lagos resplandecientes que hay aquí; por ello, no es de extrañar que, tanto lugareños como celebridades de Hollywood, tengan un escape de la ajetreada vida urbana en este lugar. Con encantadoras ciudades pequeñas como Gravenhurst, Port Carling y Huntsville así como miles de resplandecientes lagos azules, Muskoka ofrece lo mejor de actividades acuáticas, con un paisaje prístino y galerías así como boutiques de artesanos, por lo que siempre hay algo que mirar. Además, las opciones de hospedaje son acogedoras y están rodeadas de naturaleza, por lo que rentar una cabaña es una opción perfecta para reconectarse. También hay hoteles que ofrece una noche relajante, como Trillium Resort & Spa, en Port Sydney, o JW Marriott Rosseau Resort and Spa, en el lago Rosseau. Ambos cuentan con una sesión de masaje en pareja y una velada romántica con vista al lago.

El lago Rosseau

El lago Rosseau brinda el refugio perfecto para las parejas: el JW Marriott Rosseau Resort and Spa, donde una noche de relajación y romantiscismo es segura. Foto: JW Marriott Rosseau Resport and Spa.

Día 5: parque provincial Algonquin

Despierten temprano y manejen una hora entre los lagos que manchan Ontario central hasta llegar al primer parque fundado en la provincia, Algonquin. Aquí hay un museo y la quintaescencia de la experiencia de Ontario: lagos por centenares para elegir en cuál quieren remar o pescar. Una opción de renta para explorar las aguas es Algonquin Outfitters, que te enseñan a utilizar la canoa y cuentan con el equipo necesario, aunque caminar entre el aislamiento de los árboles enormes y el silencio de la naturaleza de la mano de tu pareja es la mejor opción para conocer el lugar.

canada-viaje-ontario-add-.jpg

El Parque Provincial Algonquin cuenta con todos los deportes acuáticos que imagines, pero nada mejor que remar en pareja. Foto: Destination Canada.

Antes de hacer senderismo recarguen energías con un almuerzo en algunos de los lodges escondidos en el parque como Arowhon Pines Resort o Killarney Lodge. Dirígete a Ottawa y termina tu día con una cena en la capital del país. Una buena opción es Atelier, el restaurante del chef Marc Lepine que sirve un menú de degustación de 12 tiempos todas las noches preparado con un horno solar, nitrógeno líquido y otras técnicas experimentales.

Algonquin Park

La cercanía de Algonquin Park a Toronto así como a Ottawa lo hacen uno de los escapes naturales más concurridos de la provincia. Foto: Destination Ontario.

Día 6: Ottawa

Tras muchos días en la naturaleza, la vibrante capital aguarda para hacerlos sentir en casa. Para desayunar, visiten el barrio del mercado ByWard donde, desde hace 200 años, agricultores y productores se dan cita para vender los alimentos más frescos. Después, un par de bicicletas serán básicas para explorar el canal Rideau, la famosa estatua de araña de la Galería Nacional de Canadá o el Museo canadiense de la historia antes de llegar a la colina del Parlamento. En este complejo se puede ver el cambio de guardia por las mañanas y, por la noche, es posible admirar el impresionante espectáculo de mapping que toma por lienzo la fachada del edificio. La ciudad siempre está llena de vida con festivales todo el año, como el Nostalgia Music Festival (del 19 al 22 de agosto) o el famoso Ottawa Blues Festival, que tendrá lugar en julio de 2020. Antes de partir no olvides probar un BeaverTails, masa con topping a tu elección: el clásico maple, chocolate, azúcar, canela, etc.

Día 7: Kingston

El este de Ontario está lleno de comunidades que combinan el patrimonio histórico con lo contemporáneo. Un ejemplo de ellos son las calles adoquinadas y abundante arquitectura de piedra caliza de Kingston, una de las ciudades más antiguas de Canadá y anterior capital de Canadá: aquí se organizó el primer mercado campesino de Ontario, se construyó la casa del primer Primer Ministro de Canadá, la primera iglesia anglicana, el primer periódico y se fundó una de las universidades más antiguas... pero los encantos de la ciudad van más allá de la historia, ya que ha desarrollado una escena gastronómica interesante sin mencionar las breweries y las boutiques de creaciones artesanales. Aprovecha el día desde temprano e inicien con una taza de café en cafeterías como Crave Coffee House o Juniper Cafe, las opciones no faltan. Después, encamínense al centro histórico de Kingston, que combina los mejores restaurantes locales con las mejores vistas de la ciudad, que incluye vistas del ayuntamiento estilo neoclásico. Otra opción para disfrutar de la belleza de la ciudad es un crucero para ver las 1000 Islas desde un crucero turístico. Antes de probar la cerveza artesanal del lugar, visita el Fuerte Henry, el lugar más emblemático de la ciudad. Cuando la energía se agote, Kingston ofrece lo mejor en hospedaje histórico, como la posada Secret Garden Inn, un bed&breakfast que te transporta al siglo XIX con todas las comodidades del siglo XXI.

Kingston Canadá

Una ciudad que preserva su historia y la une con la modernidad es Kingston, donde actividades como el mercado de agricultores continúa vivo y cada vez atrae a más curiosos y amantes de lo fresco y orgánico. Foto: Destination Ontario.

Día 8: Prince Edward County

Tras varios lugares maravillosos de conocer es difícil creer que aún queden secretos en la provincia que solo están esperando por ser descubiertos. Prince Edward County es uno de ellos y ofrece la mejor manera de despedirse de Ontario. Las catas de vino están a la orden del día debido a la creciente industria del vino y son una de las actividades favoritas en pareja, además de ser el destino de escape para fin de semana favorito de los torontonianos. Después de un par de copas, aprovechen para refrescarse y tomar el sol en las sorprendentes dunas de arena en el Parque Provincial de Sandbanks. Antes de partir, no olviden pasar por un coctel único en el Drake Devonshire Inn antes de viajar las últimas dos horas de regreso a Toronto. En un día más estarás en casa, ¿por qué no disfrutar hasta el último minuto?

Parque Provincial Sandbanks

El Parque Provincial Sandbanks está ubicado a la orilla del lago Ontario y cuenta con tres de las mejores playas en Canadá, además de avistamientos de aves inigualables. Foto: ST. Jaques/ Destination Ontario.

Descubre más de Ontario y planea tu viaje en este enlace.

También te puede gustar: