A quienes amamos el café, disfrutamos cada sorbo cuando lo tenemos calientito en nuestra taza o en alguna de sus deliciosas combinaciones.
Para nuestra fortuna, existen formas simples y naturales de hacer que el café tenga un excelente sabor. ¿Probamos?
Aquí 5 formas de darle un “twist” de sabor a tu café
Chocolate en polvo
Muy sencillo. Solo necesitas agregar una cucharadita de chocolate en polvo en el filtro que contiene el café molido. El sabor del café se realza naturalmente con los sabores del chocolate, y viceversa: si quieres realzar tus preparaciones de chocolate, ¡nada como un poco de café!
Una vaina de vainilla
Si le gusta la dulzura, coloca una vaina de vainilla en la jarra de tu cafetera. La infusión será instantánea durante el flujo de la bebida.
Jengibre
Una pizca de jengibre en polvo le dará sabor a su bebida matutina. También lo puedes añadir al filtro para que se fusione al momento del colado.
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Canela
Para que parezca una bebida navideña, agrega media cucharadita de canela en polvo a tu taza. Puede agregar un poco de nuez moscada o una mezcla de 5 especias, pero ten cuidado de que no se te pase la mano porque el café perderá todo su encanto.
Cardamomo
Dos opciones para esta alternativa: en semillas: molerlo al mismo tiempo que el grano de café. En polvo: agrega una pizca a su taza habitual. ¡Listo! ¿Cuál de estas opciones te gustó más?
¿Sabías que?
La cafeína que consumimos en el desayuno echa a andar el proceso de lipólisis, que comienza a descomponer y a quemar la grasa que ingerimos y acumulamos en el cuerpo. Por ese proceso metabólico, los lípidos o grasas del organismo son transformados para producir ácidos grasos y cubrir las necesidades energéticas. Por lo que, a menos que te lo prohíba tu médico, una o dos tazas de café al día es lo ideal.
