Normalmente, cuando se trata del orgasmo masculino, es común pensar que siempre va de la mano de la eyaculación, pero la realidad es distinta. Por raro que parezca, es totalmente posible que un hombre alcance el clímax sin eyaculación.
Las razones detrás de esto pueden variar, pero la más común es la eyaculación retrógrada. En lugar de salir por el pene, el semen se desvía hacia la vejiga. Esto puede pasar después de cirugías de próstata, o como efecto secundario de algunos medicamentos que afectan el sistema nervioso.
Otra causa es la aneyaculación, que es básicamente la falta de eyaculación, incluso cuando hay excitación y un orgasmo. Esto puede pasar por lesiones en la médula espinal, trastornos neurológicos o condiciones como la diabetes.
Ahora bien, no siempre se trata de un problema médico. Algunos hombres practican de manera intencionada técnicas para experimentar orgasmos sin eyacular. Este tipo de ejercicios de control corporal ayudan a prolongar el placer y lograr varios orgasmos de manera consecutiva.
¿Es malo tener un orgasmo seco? En la mayoría de casos, no, pero si es algo constante y sin razón alguna, lo mejor es que tu pareja vaya al doctor para descartar algún problema médico.
