Cuando se trata de tipos de orgasmos, puede que los orgasmos de pezón suenen como algo sacado de la fantasía, pero son reales y para muchas mujeres son una experiencia única e intensa. Aunque no todas pueden alcanzarlos, quienes lo logran describen sensaciones muy placenteras, comparables a las de un orgasmo genital. Aquí te explicamos cómo funciona y cómo puedes explorarlo.
Los pezones son una de las zonas más sensibles del cuerpo, con alrededor de 800 terminaciones nerviosas cada uno. Cuando se estimulan con caricias, succión o cambios de temperatura, pueden activar el córtex sensorial genital en el cerebro, la misma área que responde al placer del clítoris o la vagina.
Además, durante la estimulación, el cuerpo libera oxitocina, conocida como la “hormona del amor”, que intensifica el placer y puede desencadenar contracciones musculares similares a las del orgasmo genital.
En resumen, un orgasmo de pezón no es un mito, pero tampoco es algo que todas experimenten de la misma forma. Recuerda que la sexualidad es personal y única, y la clave está en disfrutar el viaje sin presiones.