¿Qué queremos? ¡Sexo! ¿Cuándo lo queremos? ¡Ahora! ¿Cómo lo queremos? ¡En todas sus variedades!
– Bluetoothing
El sexting o mensajes de texto subidos de tono es algo en lo que ya eres experta. Pero tal vez te gustari?a jugar a encender el Bluetooth de tu smartphone en algu?n lugar pu?blico, como una sala de espera o un centro comercial, y comenzar un intercambio con alguien a quien no conoces ni de vista, pero que esta? supercerca.
Guardar el misterio es parte del asunto, pero como toda chica Cosmo sabe, las reglas se hicieron para romperse.
– Booty call
Asi? se llama a la persona con quien se puede tener sexo casual. Aqui? no hay friend zone de por medio, expectativas ni ningu?n tipo de cercani?a emocional; es diferente del precop (amigo con derechos) y los frees.
Es simplemente un desfogue con alguien a quien, cual antojo de pizza, se puede llamar en cualquier momento. ¿El u?nico requisito? Que sea muy bueno en la cama.
– Dogging
Se refiere a los encuentros sexuales con perfectos desconocidos en lugares remotos o pu?blicos. Los doggers se buscan en Internet y acuerdan citas en bosques, parques, azoteas o en calles solitarias, adentro de un coche.
Sin ningu?n previo, se lanzan a la intimidad. En algunas cibercomunidades se postean los encuentros para que acudan voyeristas; la luz interior del automo?vil encendida es la sen?al de que pueden acercarse a mirar.
– King out
Toca, besa, acaricia, manosea y ma?s… pero sin penetrar. Es diferente al petting porque va ma?s alla? de so?lo caricias. Forma parte de un singular co?digo de fidelidad de algunas parejas y, en otros casos, sirve para reavivar la pasio?n porque, segu?n los sexo?logos, quedarse en suspenso es superexcitante.
Esto tiene muchi?simas variaciones para darse placer: el foot job (masaje con los pies en los genitales), el splosh (acariciar el cuerpo untado con barro o aceite), el blow job (sexo oral) y el tickling (cosquillitas ero?ticas en lugares muy sensibles) son algunos ejemplos.
– Pansexualidad
En un episodio de Sex and the City, Samantha la menciona y predice que sera? la manera de convivir en el siglo XXI. No le faltaba razo?n: el te?rmino es un neologismo que se refiere al gusto por relacionarse ma?s alla? de estereotipos de ge?nero o convencionalismos culturales. Se trata de un enfoque abierto y muy liberal.
– Pegging
Implica una inversio?n de papeles. Mediante correas o arneses, ella se coloca un dildo como si fuera parte de su anatomi?a y penetra a su pareja. ¿Demasiado extremo? Tal vez. Pero resulta que quienes se atreven, dicen que es ultraero?tico pues estimula la pro?stata y provoca un tipo de orgasmo que ellos ni siquiera imaginaban.
– Sex coach
Los sexo?logos han muerto: esto es lo de hoy. Se trata de un entrenador especializado en mejorar la vida sexual, ya sea para quienes esta?n solteros o para los que viven en pareja. No so?lo proporciona tareas, ejercicios y orientacio?n, sino que se encarga de disen?ar un programa con base en las necesidades de cada cliente.
– Sex diet
Hace no mucho un estudio financiado por la revista Plos One en Canada?, definio? que las mujeres quemamos un promedio aproximado de 100 calori?as por cada 30 minutos de actividad sexual. De ahi? se derivo? la idea de disen?ar una especie de re?gimen hot para bajar de peso. Hora y media dedicadas al placer ma?s intenso y la posibilidad de quitarnos de encima la culpa del cupcake.
– Sexit
Empezar a echar chispas con alguien en una fiesta, ya sea tu novio, esposo o chico que acabas de conocer, y hacer mutis rumbo al ban?o, al auto o la reca?mara de los anfitriones para tener un ra?pido y refrescante encuentro, es algo cada vez ma?s comu?n.
Lo que antes so?lo se vei?a en las pelis porno, hoy es un must de la vida social-sexual.
– Swinger
Ya lo conoci?amos, pero parece que en esta e?poca de tanta apertura ha retomado nuevos aires. Cada vez es ma?s fa?cil acceder a swinger parties, pero no so?lo eso, rascando en la red podemos hallar hoteles, tours y hasta cruceros de este tipo.