¿Qué es y cómo se hace un beso negro?

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“Besa mi ano”, no es cualquier proposición, pero puede ser un plan divertido del viernes en la noche. El famoso beso negro, también llamado analingus, es sexo oral que involucra contacto boca-ano. ¿Quién tiene hambre?

¿Cómo se hace un beso negro?

Para empezar, cualquier persona de cualquier género puede hacer uno, aunque es particularmente popular en la comunidad gay. Comienza colocando tu cabeza cerca del área apropiada (también conocida como el ano de tu pareja), separa sus nalgas y masajea su ano con tus labios y lengua. Puedes usar muchas de las mismas técnicas que usarías al realizar sexo oral o cunnilingus, como lamidas lentas, besos, movimientos rápidos de la lengua, remolinos suaves o cualquier otra cosa que les guste a ambos. Una variación del estilo perrito, en cuanto a la posición, probablemente funcionará mejor aquí.

Sin embargo, al igual que con el sexo anal, Tristan Taormino, educadora sexual, señala que algunas personas se preocupan por la limpieza del área del trasero. Si sospechas que puede ocurrir un beso negro durante tu próxima sesión de sexo, Taormino recomienda tomar una ducha o un baño de antemano, lo cual no es un mal consejo para cualquier encuentro sexual, realmente. “A algunas personas les gusta usar un paño para bebés sin perfume antes para asegurarse de que todo esté súper limpio”, dice ella. También agrega: “Para un beso negro más seguro, también puedes usar un condón alrededor de la bolsa para protegerte de las ITS y otras infecciones”.

El periodista y experto sexual Sam Phillip recomienda que mientras se duchan “metan un dedo en su ano para eliminar los restos fecales”.

Además de las ITS, ¿existe algún peligro de ingerir materia fecal? Ewww, suena asqueroso, pero probablemente te lo estabas preguntando. Según una entrevista con el proctólogo Dr. David Rosenfeld, no es inherentemente peligroso. “Básicamente, hay bacterias en todas partes, en el ano, en los genitales, en la boca, y estas bacterias comunes en la boca no causan mucho daño”. En general, si tu pareja está sana, el beso negro debería estar bien. Sin embargo, si tu pareja tiene problemas intestinales (parásitos o dolor de estómago), no te arriesgues.

Algunas personas optan por realizar enemas en sí mismas en preparación para cualquier tipo de juego anal, pero no es necesario y en realidad puede presentar otros riesgos. Según un estudio por la Biblioteca Nacional de Medicina, los efectos potenciales de los enemas incluyen perforación y sepsis. Si eres una persona sana sin problemas intestinales, una ducha completa antes del beso negro debería ser suficiente.

Variaciones

Si no te gusta el estilo perrito, que es la forma más fácil de realizar el beso negro, hay muchas otras posiciones para probar.

Si te gusta dominar en la cama y tu amante es más sumiso, haz que se doble sobre una mesa o un escritorio. Luego, puedes sentarte detrás de él o ella en una silla o arrodillarte en el suelo y poner tu cara entre esas dulces mejillas. La anticipación de no poder ver lo que está sucediendo o cuándo comenzara el beso puede ser extremadamente excitante para tu pareja.

Otra posición para probar es simplemente recostarse. El receptor se acuesta en una cama con las caderas y las pompas para arriba y una almohada debajo de la pelvis. Entonces el donante se agacha detrás de ellos de rodillas, agarra las caderas del amante para aplacarse y se apoya en el trasero.

Este artículo fue originalmente publicado en Cosmopolitan US

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