Hay posiciones sexuales que al verlas parece que necesitas ser gimnasta profesional. Pero la realidad es que muchas de esas posturas “raras” pueden llevar el placer a otro nivel si les das una oportunidad y, claro, si lo haces con la persona y el ritmo adecuado. Aquí te contamos de algunas posiciones sexuales incómodas pero muy placenteras que vale la pena intentar.
Doggy style elevado
Puede parecer complicada porque necesitas encontrar una superficie con la altura ideal, como el borde de una cama o un mueble, ya que tengas la parte de la altura cubierta, necesitas estar de rodillas y tu pareja de pie detrás de ti. Aunque al principio el equilibrio puede ser un reto, el resultado es una penetración profunda que estimula justo donde debe.
La flor de loto extendida
Aquí estás sentada sobre tu pareja, viéndose cara a cara, con las piernas estiradas hacia los lados mientras él se apoya con los brazos hacia atrás. Puede que necesites algo de flexibilidad, pero fuera de eso, el contacto visual, la fricción del clítoris y el nivel de intimidad hacen que todo valga la pena.
Cucharita profunda
En esta posición, ambos están acostados de lado, pero con un twist: tú levantas una pierna al pecho y él entra desde atrás. Es menos “posición para dormir” y más “posición para conectar despacio pero con fuerza”. La estimulación con esta posición eleva el nivel de placer a los cielos para ambos, es ideal para momentos íntimos en los que no se tiene prisa.
Puente invertido
Ahora bien, si tienes ganas de experimentar algo más exigente, el puente invertido puede sorprenderte. Tú estás boca arriba, con las plantas de los pies apoyadas y las caderas elevadas, lo que cambia por completo el ángulo de la penetración. Además, él puede regular la profundidad y el ritmo. Es una posición intensa, ideal si buscas una sensación nueva.
Contra la pared de pie
Para quienes se atreven a jugar con la espontaneidad, la posición contra la pared es lo que buscas. Aquí, tú te inclinas hacia adelante, usas la pared para apoyarte, y dejas que él entre desde atrás. Puede que necesite algo de coordinación y estabilidad, pero lo que le falta de comodidad lo compensa con intensidad del placer.
