¿Por qué se siente culpa después de autocomplacerse?

Una de las grandes herramientas para el autoconocimiento en el ámbito sexual, tiende a traer mucha culpa, pero, ¿por qué?

¿Por qué se siente culpa después de auto complacerse?

¿Por qué se siente culpa después de auto complacerse?

Freepik

Si algo es seguro, es que la autoexploración es algo completamente natural y una forma de conectar contigo misma, pero para muchas personas, puede venir acompañada de sentimientos de culpa o incomodidad. Si te ha pasado, no estás sola. Esto tiene mucho que ver con los mensajes que hemos recibido sobre la sexualidad y cómo los internalizamos.

Desde pequeñas, muchas crecen rodeadas de tabúes. La idea de que hablar de sexo o explorar tu cuerpo es algo “malo” o “inapropiado” está profundamente arraigada en varias culturas. A esto se suman las creencias religiosas, que en algunos casos asocian la autoexploración con el pecado, dejando una estrago emocional incluso en quienes ya no practican esa fe.

Además, la educación sexual que recibimos suele ser limitada o inexistente, y rara vez se nos enseña que explorar nuestra sexualidad no solo es normal, sino saludable. Si a esto le sumamos las expectativas sociales de género, que a menudo esperan que las mujeres sean menos abiertas con su sexualidad, no es sorpresa que puedas sentirte conflictuada.

Cuando te autoexploras, tu cuerpo libera sustancias como la dopamina y la serotonina, que te hacen sentir bien. Pero si tienes creencias negativas sobre el acto, es posible que ese placer sea seguido por una sensación de vacío o culpa. Es como un choque entre lo que tu cuerpo disfruta y lo que tu mente cree que está permitido.

Ahora bien, para dejar de sentir culpa no hay una fórmula mágica que de la noche a la mañana te quite esas emociones. Pero puedes empezar por aprender sobre tu cuerpo, sobre la sexualidad, y recuerda que la autoexploración tiene beneficios reales, como reducir el estrés y mejorar tu descanso. También es importante reflexionar, ¿esas creencias que te hacen sentir mal realmente son tuyas, o vienen de lo que te enseñaron?

Al final del día, no hay nada malo en autoexplorarte. Tu cuerpo es tuyo, y aprender a disfrutarlo y entenderlo es parte de una vida plena. Con el tiempo, esos sentimientos de culpa pueden transformarse en aceptación y autoconfianza. Recuerda que nadie merece más tu respeto y cuidado que tú misma.