Si tener sexo en la playa era uno de tus planes románticos este verano, es momento de que lo saques de tu bucket list...
Películas como Tengo ganas de ti y Amanecer parte 1 nos hicieron creer que tener sexo en la playa es un must cuando se trata de cumplir fantasías sexuales con tu pareja. El sonido de las olas, la luz de la luna y la arena en tus pies; todo indicaría que te encuentras en el lugar ideal para tener relaciones íntimas e inolvidables con esa persona especial. Sin embargo, venimos a abrirte los ojos: ¡no es bueno tener sexo en la playa! ¿Por qué? Aquí te damos varias razones...
Puede ser ilegal
Existen una serie de riesgos legales si te descubren teniendo sexo en la playa, pues se trata de un lugar público y en la mayoría de las ocasiones, familiar. Así que sí: pueden arrestarte por un delito de exhibicionismo. Incluso se trata de un acto que aún no está permitido en las playas nudistas; puedes arriesgarte a pagar una multa o bien, a ser encerrado durante algunas horas en la cárcel.
Rozaduras
Acostarte en la arena no es el lugar más cómodo que digamos. Incluso las playas de arena suave pueden provocarte daños en la piel, como rozaduras, erupciones cutáneas, hinchazón, inflamación, ardor y enrojecimiento, sobre todo considerando que la humedad y el sudor se vuelven los principales protagonistas en este ambiente.
Infecciones
La playa es el lugar idóneo para la proliferación de bacterias. El océano y la arena cuentan con una gran cantidad de microbios y gérmenes que fácilmente pueden llegar a tu zona íntima. Además, debes tomar en cuenta que los preservativos tienden a romperse con la fricción del agua, por lo que también podrías contraer enfermedades de transmisión sexual o un embarazo no deseado.
Sequedad vaginal
Si uno de tus objetivos es aumentar la lubricación vaginal para tener una relación sexual más placentera, lamentamos decirte que el mar no es la opción más óptima. De hecho, el agua solo contribuirá a la sequedad vaginal, lo que generará irritaciones y dolor durante el acto en lugar de placer y comodidad.
Insectos
Hay un sin fin de insectos en la playa, desde arañas hasta pulgas que podrían colarse en zonas genitales. Al tener relaciones sexuales tanto en la arena como en el mar, te expones a sufrir una incómoda picadura que podría terminar en una severa infección.