Pocas cosas pueden inhibir tanto el deseo de tu chico como que tengas mal aliento, ¡que no te ocurra!
Contantemente, cuando le preguntamos a los chicos cuáles son los peores errores que cometemos en la cama, cosas como inhibiciones, prejuicios o ser poco delicadas son algunas de las menciones más recurrentes.
Sin embargo, el mal aliento es algo que resulta súper desagradable para la gran mayoría de ellos... es decir, como que no está rico dar un beso súper apasionado, de ésos que nos ponen a tono, si el galán en cuestión no puede ocultar que comió algo con mucha cebolla o que hace horas no se cepilla los dientes, ¿verdad?
Pues lo mismo les ocurre a ellos, ¡claro que odian que nosotras no seamos cuidadosas con este detalle! Créenos, puede bastar para que sus sensores de excitación se apaguen.
Por eso te preparamos una guía de los aspectos que debes cuidar para que tu aliento sea fresco y lo invite a besarte sin cesar... y a mucho más.
Cuida tu higiene
Así como te desmaquillas cada noche a conciencia, cepilla tus dientes tres veces al día, reemplaza tu cepillo cada tres meses y acude al dentista cada seis para una limpieza profunda.
Recuerda cepillar también la lengua, para eliminar el sarro que se le forma.
Evita comer esto
Cuando consumes cebolla y/o ajo, sus componentes provocan que su olor permanezca cuando exhalas, incluso después de lavarte los dientes.
Si te preparas para una noche de pasión, también evita carnes, grasas y picantes.
Y siempre come esto
Por el contrario, los lácteos te ayudarán a eliminar el mal aliento.
Una rama de perejil fresco, infusiones de menta o comer manzanas serán de gran ayuda para mantener tu boca fresca y limpia.
No olvides beber dos litros diarios de agua, para favorecer la salivación.
Tabaco y alcohol
El cigarro, además de dejarte oliendo a cenicero, afecta el flujo de saliva en la boca y la sequedad es uno de los principales factores que generan mal aliento.
El humo también obstruye la oxigenación de las encías y propicia la aparición de gingivitis, otro gran causante de la halitosis.
El alcohol y el café dejan muchos residuos y se fijan a la placa dental.