Gracias al viagra que fue un éxito inmediato entre los hombres estadounidenses descubrimos que el origen del placer femenino no es ni de cerca parecido al orgasmo masculino…
Hasta la fecha, la sexualidad femenina es un tabú entre la gente de a pie, pero resulta aún más catastrófica cuando la ciencia presenta sesgos y prejuicios ante la anatomía femenina ya que, el viagra que sí funciona para los hombres no ha sido suficiente para solucionar los problemas sexuales de las mujeres.
En 1998 la pastilla azul revolucionó accidentalmente la vida sexual de los hombres al presentar reacciones inmediatas en otra parte del cuerpo que nada tiene que ver con su objetivo principal, ya que esta fue inventada para solucionar problemas cardíacos, sin embargo, los hombres que utilizaron el novedoso invento manifestaron erecciones más duraderas y consistentes por lo que, el equipo científico que le devolvió toda esperanza a los hombres con disfunción eréctil tuvo la genial idea de implementar un medicamento parecido para la otra mitad de la población que padece anorgasmia.
A 25 años del revolucionario descubrimiento contra la disfunción eréctil, la ciencia no ha logrado obtener un medicamento similar para solucionar el desempeño sexual de las mujeres básicamente porque el orgasmo femenino tiene otra lógica distinta al de los varones.
Esto es lo que nos enseñó el viagra sobre el orgasmo femenino
En un inicio, los participantes que colaboraron a la investigación de la píldora azul -que fue principalmente inventada para combatir problemas cardíacos- reportaron un incremento en las erecciones por lo que se descubrió que uno de los componentes del Viagra (inhibidor de la PDE5) estaba actuando sobre el cuerpo cavernoso del pene por su eficacia para irrigar sangre en esa zona. De ahí la reacción que reportaron los voluntarios del estudio.
De inmediato, la farmacéutica implementó investigaciones sobre el orgasmo femenino y una píldora rosa bajo el mismo principio que el de la píldora azul: estimular la circulación sanguínea en vagina y clítoris.
Sin embargo, los resultados no fueron los esperados. Las mujeres que utilizaron los primeros intentos de la píldora rosa no reportaron una mejoría en su desempeño sexual y es que, de acuerdo con Lori Brotto, profesora del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Universidad de British Columbia en Canadá, los principales problemas de la sexualidad femenina no están relacionados con el flujo sanguíneo en la zona genital, como en el caso de los hombres, sino que se reducen a la perdida del deseo sexual por motivos psicoemocionales.
Mientras la píldora azul puede hacer milagros aún sin que el varón sienta deseo, en el caso de las mujeres debe estar presente el componente erótico y emocional para experimentar un orgasmo ya que no sólo es fisiológico.
Alternativas al Viagra femenino para solucionar problemas de anorgasmia
Según la lógica del primer intento por implementar un medicamento similar al viagra para hombres, todo parece señalar a que la psique tiene una fuerte influencia sobre la sexualidad femenina por lo que las grandes farmacéuticas están apostando por una inesperada alternativa: los antidepresivos y aunque los estudios pertinentes aún están en desarrollo, el primer descubrimiento es que para lograr una mejoría en la libido de las mujeres sería necesario llevar un tratamiento diario y que implica dejar de beber alcohol para poder utilizar los medicamentos que podrían revertir la anorgasmia femenina.