Normalmente, si pensamos en suplementos para la disfunción sexual, en automático te viene a la mente el sildenafilo, también conocido como Viagra, el cual ha sido la opción popular para tratar la disfunción eréctil en los hombres. Pero si alguna vez te has preguntado si existe un “viagra femenino”, la respuesta te va a dejar sorprendida.
Como tal, sí existen medicamentos para el deseo sexual en mujeres, pero su manera de funcionar es distinta y no tan inmediata como la versión masculina. A diferencia de la falta de respuesta sexual masculina, la cual usualmente tiene causas físicas como el flujo sanguíneo, el deseo sexual femenino está influenciado por una combinación de factores hormonales, emocionales y psicológicos.
Por eso es que hacer una pastilla para aumentar el deseo sexual en mujeres no ha sido tan sencillo como replicar la fórmula del Viagra en color rosa. Pero sí hay medicamentos aprobados para el Trastorno del Deseo Sexual Hipoactivo (TDSH) en mujeres premenopáusicas. El primero es flibanserina, conocido como Addyi, que se toma diariamente y actúa sobre los neurotransmisores relacionados con el deseo sexual. Cabe mencionar que como tal, no es un afrodisíaco y sus efectos no son inmediatos, y como con todo medicamento, puede causar efectos secundarios como náuseas, mareo o fatiga.
La segunda opción es bremelanotida, conocida como Vyleesi, su formato es distinto, ya que es una inyección subcutánea que se debe aplicar justo antes de tener relaciones sexuales. A diferencia de Addyi, no se usa todos los días, sino cuando se necesita. Aunque también actúa a nivel cerebral, funciona distinto. Puede provocar efectos secundarios como enrojecimiento facial, náuseas o malestar en la zona donde fue aplicado.
Ambos tratamientos han demostrado mejorar el deseo sexual en algunas mujeres, pero los beneficios suelen ser moderados y no funcionan igual para todas. Es por eso que los especialistas recomiendan que estos medicamentos vayan acompañados de un enfoque integral que incluya apoyo psicológico, terapia sexual o de pareja, y una revisión completa de la salud física y emocional.
Ahora bien, aunque sí se han realizado estudios con sildenafilo en mujeres, no han encontrado resultados consistentes ni han logrado demostrar una mejora significativa en la función sexual femenina. Por eso no está aprobado para su uso en mujeres y automedicarse con Viagra no es algo recomendable.