Cuando se trata de un corazón roto no solo es esa sensación de que se te hunde el pecho y tu mundo se viene abajo, también tiene un gran impacto en tu cuerpo. Esa mezcla de dolor físico, vacío y emociones desbordadas tiene una explicación científica. Aquí te contamos qué ocurre en tu cuerpo durante un desamor.
Tu cerebro entra en modo alerta
Cuando te rompen el corazón, tu cerebro lo interpreta como una amenaza. La amígdala, que regula el miedo y el estrés, se activa y desata una avalancha de cortisol, la hormona del estrés. Esto te hace sentir ansiosa, agotada y emocionalmente al límite. Además, el rechazo activa las mismas áreas del cerebro que el dolor físico, según un estudio de The Journal of Neurophysiology. Por eso, duele como si literalmente te hubieras roto alto.
Tu corazón sí se ve afectado
El síndrome del corazón roto, o miocardiopatía de Takotsubo, es una condición real. Bajo estrés extremo, el músculo cardíaco puede debilitarse temporalmente. Los síntomas, como dolor en el pecho o dificultad para respirar, pueden darte la sensación de que tendrás un ataque al corazón.
Tus hormonas se vuelven locas
Durante una relación, tu cerebro tiene una dosis constante de oxitocina y dopamina, las hormonas de la felicidad. Tras una ruptura, sus niveles se desploman, dejándote con una sensación de vacío. Esto puede provocar insomnio, pérdida de apetito o incluso esos famosos atracones por tristeza. Según Psychological Science, esta caída hormonal es comparable a un síndrome de abstinencia.
Tu sistema inmunológico se debilita
¿Has notado que después de un breakup, te enfermas? El estrés emocional no solo afecta tu ánimo, también impacta tu sistema inmunológico. El exceso de cortisol reduce tu capacidad para combatir infecciones, lo que te hace más propensa a resfriados o enfermedades.
El dolor se siente físico
Ese nudo en el estómago, la presión en el pecho o el dolor de cabeza no son imaginarios. El estrés emocional provoca tensión muscular y puede alterar tu sistema digestivo, haciendo que el dolor emocional también sea físico.
Tu cerebro empieza literalmente a resetearse
Aunque no lo parezca, tu cerebro trabaja para adaptarse. Con el tiempo, las conexiones neuronales asociadas a tu ex se debilitan, lo que hace que los recuerdos sean menos dolorosos y puedas avanzar.
Aunque terminar con alguien duele (y mucho), tu cuerpo y mente están diseñados para sanar. Date tiempo, sé amable contigo misma y recuerda que con cada caída estás más cerca de volver a brillar.
