Extrañar a tu ex mientras estás en una relación sana puede parecer contradictorio, pero es algo más común de lo que crees. Pero a ver, dejemos en claro que esto no siempre significa que tu relación actual esté fallando o que todavía sientas amor romántico por esa persona. A veces, simplemente es la nostalgia tocando a nuestra puerta.
Las relaciones, especialmente aquellas que fueron significativas, tienden a dejar huellas emocionales. Extrañar a un ex puede darse por cosas muy pequeñas, desde recordar una rutina compartida, una broma interna o un momento especial.
Esto no es sinónimo de que quieres volver con esa persona, sino que tu mente revive instantes que, en su momento, te hicieron feliz. Según la psicóloga clínica Suzanne Lachmann, nuestro cerebro suele idealizar el pasado, especialmente cuando nos sentimos vulnerables o inseguros.
Esto no significa que debas entrar en pánico si te encuentras pensando en tu ex. Lo importante es cómo interpretas esos pensamientos y cómo afectan tu relación actual. Si extrañarlo no te impide disfrutar de tu pareja actual, no es motivo de alarma.
Pero si notas que estás comparando constantemente a tu ex con tu pareja o que esos recuerdos te generan inquietud o insatisfacción, tal vez sea momento de reflexionar más a fondo.
Para manejar estas emociones, es clave ser honesta contigo misma. Pregúntate si extrañas a la persona o solo lo vivido. Muchas veces, lo que realmente echas de menos no es a tu ex, sino la versión de ti misma que existía en esa etapa de tu vida.
Como con cualquier otro proceso emocional, el tiempo es tu mejor aliado. Si tu relación actual te hace feliz y estás creciendo junto a tu pareja, esos pensamientos irán perdiendo fuerza. Extrañar a alguien del pasado no significa que no ames a quien está a tu lado hoy. Solo muestra que eres humana, con una historia emocional compleja, y eso está bien.