¿El apego sexual se puede confundir con enamoramiento?

A veces un encuentro íntimo puede llegar con emociones fuertes, pero es importante no confundirlas

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¿El apego sexual se puede confundir con enamoramiento?

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Puede que alguna vez en un encuentro íntimo con alguien nuevo puede que surja la duda ¿esto es amor o solo una conexión a nivel sexual? Por irreal que parezca, a veces entender la diferencia entre un apego sexual y un enamoramiento real puede ser complicado pero es fundamental para evitarnos pasar un mal momento.

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Por superficial que parezca, este ha sido motivo de problemas graves en muchas relaciones

El sexo tiene ese poder misterioso de hacernos sentir cerca de alguien en cuestión de minutos. Pero esa sensación de conexión profunda no siempre significa que hayas encontrado a “la persona”, sino que tu cuerpo está reaccionando de forma completamente natural y a veces solo eso química.

El enamoramiento va mucho más allá del deseo, se construye con el tiempo al conocer a la otra persona en distintos ámbitos. El amor real no depende exclusivamente del contacto físico. Puedes sentirte igual de conectada después de hablar por horas que después de una noche apasionada.

Si sientes que estás en el limbo y no tienes claro si es enamoramiento algo físico, afortunadamente hay señales sutiles que pueden ayudarte a distinguir. Empezando por los recuerdos importantes que tienes con esa persona, si la mayoría están ligados a momentos en la cama y las conversaciones fuera de ese contexto se sienten forzadas o superficiales, es muy difícil que esté presente el enamoramiento. La ansiedad constante también puede ser una pista,ya que el amor tiende a dar más paz que incertidumbre.

Al final del día, no es que seas una “intensa” que se enamoro al segundo, es que nuestro instinto biológico está programado para crear lazos después del sexo, especialmente en las mujeres. Un estudio reciente demostró que la oxitocina liberada durante el sexo puede intensificar el deseo de formar un vínculo, aunque la conexión fuera de la cama no sea tan fuerte como creemos.