¿Coquetear es infidelidad?

coquetear es infidelidad

¿Coquetear es infidelidad? Si estás en una relación y tú o tu pareja coquetean con otra persona, puede ser una situación difícil. Por un lado, no es como si alguien hiciera algo físico que se pueda interpretar como infidelidad con I mayúscula, pero por otro lado, no es nada. Dependiendo de tu relación, tus límites y los de tu pareja, así como otros factores, el coqueteo puede causar mucho dolor y daño.

Depende de a quién le preguntes, puedes obtener diferentes respuestas sobre si coquetear o no en una relación cuenta como poner el cuerno. Debido a que no solo es un “sí” o “no” en blanco y negro y las personas tienen diferentes sentimientos al respecto, le pedimos a diez expertos que den su opinión sobre si coquetear cuenta o no como infidelidad.

1. Depende de la intención…

“Alguien podría ser simplemente una persona muy extrovertida y amigable con los demás, pero no desea llevar una relación con alguien fuera de su pareja. Sin embargo, alguien más podría estar tratando de sentir hasta dónde pueden llegar para llamar la atención de otra persona, cuánto pueden salirse con la suya, o qué nivel de conexión pueden alcanzar con otra persona. Es un cuestión de intenciones e integridad en el corazón de la persona. Si alguien no coquetea a propósito, sino que nada más es realmente amigable y esto molesta a la pareja, la pareja debería compartir cómo se siente y ambos pueden trabajar en cómo abordar una solución” - Michele Croyle, MA, LPC.

2. Técnicamente no es infidelidad, pero podría ser muy perjudicial para tu pareja…

“Mientras que coquetear técnicamente no es poner el cuerno, podría verse como una violación de la fidelidad porque estás mostrando interés en otra persona. La sola idea de mirar fuera de la relación y actuar de acuerdo con ella, incluso con moderación, puede ser vista como perjudicial por tu compañero. También es una pendiente resbaladiza que no podrás detener si progresa más allá del coqueteo”. - Rabino Sholomo Slatkin, MS, LCPC.

3. Para algunas parejas, coquetear podría agregar emoción a la relación…

“Cada pareja es diferente y tendrá ideas diferentes sobre lo que está bien y lo que no está bien en las relaciones. En las relaciones saludables, las parejas establecen y se adhieren a límites claros y consistentes en torno a muchos comportamientos, incluyendo el coqueteo. Algunas parejas encontrarán el coqueteo ofensivo y similar a la infidelidad. Otras parejas pueden encontrar que esto aumenta la emoción en su relación. Lo que importa es que el tema se discuta abiertamente y que ambos individuos en una relación sepan y acuerden los límites en torno a lo que es y no es aceptable”. - Natalia Mica, MED, LPC.

4. Depende de las reglas y expectativas de la relación…

“Coquetear puede percibirse absolutamente como una traición, pero depende de las reglas y expectativas de la relación. Algunas parejas no ven el coqueteo como infidelidad porque no representa una amenaza para la infraestructura de la relación y no rompe ninguna de las reglas de la relación; otros ven el coqueteo como problemático e irrespetuoso. Depende de las parejas tener conversaciones sobre sus puntos de vista sobre el coqueteo para que puedan desarrollar reglas y pautas para su relación”.- Tiffany C. Brown, PsyD, MA, CAMS-II.

5. No, no es poner el cuerno, pero es importante ser consciente de los comportamientos que pueden romper la confianza de tu pareja…

“No, coquetear no es ser infiel. Algunas personas son naturalmente carismáticas o simplemente disfrutan coquetear sabiendo que no pasará nada. Sin embargo, trabajo con los clientes para ayudarlos a distinguir entre comportamientos que se consideran engaños y comportamientos que rompen la confianza. Coquetear puede romper la confianza y hacer que la otra persona se sienta insegura. En este caso, es importante que cada persona negocie sus necesidades y se comprometa”.- Anita A. Cilipala, LMFT

6. Debe fomentarse en una relación sana…

“El coqueteo es una forma saludable de comprobar que sigues siendo atractivo para los demás, incluso cuando realmente no estás tratando de atraerlos. Sin embargo, no alentaría demasiado el coqueteo en presencia de tu pareja. No es una competencia y no debería ser amenazante. Todos sabemos cuando tenemos buenas intenciones de diversión que cruzan la línea. Si te dan ganas de cruzar la línea, retrocede y corrige. Los celos pueden obstaculizar la felicidad, al igual que la infidelidad. Es por eso que no querrás darle a tu pareja ninguna razón para creer que quieres caminar por ese camino egoísta del desamor. Una vez que se rompe la confianza, es muy difícil de volver, así que coquetea responsablemente”, Ingrid Stgare, coach de relaciones.

7. No es infidelidad “oficial” pero la misma dinámica existe…

“Aunque el coqueteo no puede considerarse oficialmente infidelidad, la misma dinámica puede estar en la raíz del coqueteo y el engaño. Si te encuentras coqueteando con alguien que no es tu pareja, pregúntate a ti mismo ¿De qué estoy huyendo? ¿Qué es lo que me gusta de coquetear? Tal vez sea atención, tal vez sea respeto, tal vez sea admiración. 2. ¿Estoy perdiendo esas cosas con mi pareja? Muchas veces la dinámica de la relación puede crear una apertura hacia donde coquetear puede ser un comportamiento atractivo para ayudarte a satisfacer un deseo o anhelo, pero solo temporalmente. 3. ¿Cómo puedo pedirle a mi pareja que me ayude satisfacer estas necesidades? Si no haces las preguntas más profundas, el coqueteo puede convertirse en un droga de entrada para engañar después, Debemos mirar dentro por satisfacción, no por una atención superficial”.- Christie Tcharkhoutian, EdD, MA, MFT.

8. Si no lo harías delante de tu pareja, no lo hagas cuando esté allí…

“Creo que el error más grandees que el engaño tiene que ser físico, ese no es el caso. Puede ser emocional y puede ser coqueteando. Cuando abres una puerta para ser coqueto, esto puede permitir que entre la oportunidad de ser infiel físicamente. La regla general en las relaciones es que si no coquetearías con alguien delante de tu pareja, entonces no lo hagas cuando no esté allí. La segunda regla general: si no quieres que tu pareja coquetee con otras personas, entonces no lo hagas tú. Independientemente de si esto lleva a la infidelidad o no, es una cuestión de tener límites y tener respeto por tu relación y tu pareja”.- Sophia Reed, PhD, NCC.

9. Si el coqueteo es secreto o rompe los límites de la relación, es una violación de la confianza

“En la terapia de pareja, definimos infidelidad como algo secreto que rompe los límites de la relación primaria. Si la pareja se siente cómoda con el coqueteo y puede hacerlo sin sentirse amenazado, entonces ciertamente no es infidelidad. Sin embargo, si uno de los dos no se siente cómodo con el otro coqueteando, entonces ciertamente es una violación de la seguridad en la relación. Las verdaderas preguntas son: hasta qué punto estás dispuesto a llevar el coqueteo, con qué frecuencia lo estás haciendo y cómo estás afectando a tu relación?”- Ebru Halper, LPC, NCC.

10. La mayoría de las personas se sentirían amenazadas por el coqueteo de su pareja

“Aunque el término infidelidad generalmente se asocia con comportamientos más explícitos como tener relaciones sexuales con otra persona o tener una aventura emocional, la mayoría de las parejas en una relación íntima comprometida se sentirán amenazadas por el coqueteo de su pareja. A nadie le va bien en una relación donde no sienten que vengan primero en los ojos de su pareja. Obviamente hay grados de infidelidad. Nadie estaría en desacuerdo con que coquetear está en un nivel diferente que tener relaciones sexuales con otra persona. Pero coquetear aún debe ser eliminado de la mesa si le causa angustia a tu pareja”.- Gabrielle Usatynski, MA, LPC.

Bottom Line

Cada relación es diferente y dependiendo de lo que tú y tu pareja hayan establecido como límites, de lo que han hablado y también de cómo se sienten, la respuesta puede diferir de una pareja a otra. Sin embargo, lo que no cambia es la comunicación y el respeto que son de suma importancia cuando se trata de mantener una dinámica saludable.

Este artículo fue originalmente publicado en Cosmopolitan US